Unas albóndigas con su huevo cocido y frito en salsa de almendras es de los platos que te traen recuerdos de otros tiempos, por eso me gusta rescatar estas recetas, creo que no debemos perder las, y con la oportunidad que tenemos con la olla lenta de cocinar como "la abuela", hay que aprovechar el momento.
Por estos motivos me gusta participar en el reto de Carol, "haz lo que te salga de la olla lenta", donde aportamos nuestras recetas según lo indicado cada mes, y este mes tenemos albóndigas, por ello os traigo esta receta tan clásica de Andalucía.
INGREDIENTES: (4 raciones)
Para las albóndigas: 200 gr. de carne de cerdo picada, 200 gr. de carne de pollo picada, 50 gr de jamón serrano, 6 huevos, 3 dientes de ajo, perejil, miga de pan remojada en leche, sal, pimienta negra, nuez moscada, harina.
Para la salsa: 50gr de almendra molida, 2 rebanadas de pan, 1 chalota, 1 cebolla, pimentón dulce, comino, sal y aceite AOVE.
ELABORACIÓN: Para hacer las albóndigas, mezclamos la carne, y le añadimos el pan mojado en leche y 2 huevos. En la picadora, trituramos dos ajos el perejil y el jamón serrano y lo añadimos a la mezcla, junto con un poco de sal, nuez moscada y pimienta negra. Mezclamos muy bien y dejamos reposar una noche en el frigorífico.
Al día siguiente liamos las albóndigas, se enharinan y se frien.
En una sartén tostamos un poco la almendra molida y la pasamos a la olla lenta.
Añadimos las albóndigas fritas.
En la misma sartén ponemos aceite de oliva, 1 ajo partido, la chalota (opcional) y freimos, una vez lo vemos dorado lo pasamos al vaso de la batidora. En la sartén ponemos un poco de aceite y la cebolla picada y freímos 5 minutos, añadimos el pimentón y el comino, movemos bien y lo pasamos también al vaso de la batidora, trituramos.
Lo añadimos a la olla lenta, tapamos y se deja en alta 3 horas. Me gusta ponerle un trozo de jamón serrano del que nos queda pegado al hueso y que no hay quien pueda con él, pero esto es opcional es para dar más sabor a la salsa.
Lo dejamos 3 horas en alta.
Para preparar los huevos, los cocemos, se pelan y con un palillo se pinchan hasta la yema para que no revienten. Se enharinan y se fríen.
Servimos el plato con las albóndigas, su salsa y un huevo. No nos olvidemos del pan, que hará falta.
A disfrutar.