Las alcachofas son uno de los deliciosos manjares de los que podemos disfrutar en España.
Disponemos de ellas durante todo el año, ya sean frescas o en conserva, y con ellas podemos elaborar infinidad de recetas.
Son todo un clásico de la dieta mediterránea.
Hoy vamos a elaborarlas con jamón serrano y vino blanco. Una receta sencilla pero no por ello menos deliciosa.
Ingredientes
- 8 alcachofas
- 200 gr. jamón serrano cortado en daditos
- Aceite de oliva
- 1 cebolla
- 1/2 vaso de vino blanco
- Sal
- Limón
- Pimienta negra molida (opcional)
Preparación
Pelamos las alcachofas si son frescas quitándoles las capas más duras y podemos dejar el tallo si lo deseamos.
Las partimos por la mitad y untamos cada una con un poco de limón para evitar que se ennegrezcan.
En una cazuela cocemos las alcachofas en abundante agua con sal.
Picamos muy fina la cebolla y la ponemos a dorar en aceite de oliva. Cuando esté casi hecha, agregamos las alcachofas.
Mezclamos bien y cuando esté casi listo se le añaden los daditos de jamón.
Agregamos un poco de sal, pimienta al gusto, un poco de caldo de cocción y un chorrito de vino blanco.
Dejamos evaporar y servimos calientes.
Notas
Las alcachofas con jamón se pueden servir como entrante, guarnición o plato principal, dependiendo de la cantidad y de los acompañamientos utilizados.
Cuanto mejor sea la calidad de los ingredientes mejor será el resultado de la receta. Las alcachofas tienen que ser tiernas y el jamón, si nuestro bolsillo nos lo permite, lo podemos poner ibérico.
La pimienta como os he dicho es opcional, sin ella están también deliciosas.
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Fuente: este post proviene de El Desván de Vicensi, donde puedes consultar el contenido original.
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