El protagonista de hoy es el queso, y no un queso cualquiera, de eso nada.
Un Queso Gomero de Cabra, Ahumado y Viejo, muy Viejo.
De ese que se rompe y desmiga al cortarlo, que con un pequeño trozo en la boca tienes sabor intenso durante un buen rato; y del que pica, porque un viejo queso tiene que picar.
Y ¿de dónde es la receta de hoy? De una isla preciosa y única: La Gomera.
Quizás no la más conocida, pero ahí radica su encanto. Posee una Naturaleza increíble, unos Senderos para recorrer que parecen de otro mundo, el Bosque más antiguo de Europa, un Silencio extraordinario y un Mar de nubes que la envuelve y la hace singular.
Por eso se la conoce como "La Isla Mágica".
Y entre su rica y desconocida gastronomía, como especialidad destaca su ALMOGROTE
El Almogrote es una pasta untable, que se toma generalmente a modo de picoteo sobre pan tostado y resulta delicioso a la vez que intenso. Como todas las recetas tradicionales, cuenta con distintas versiones, según la familia o casa donde se realice.
Ya en la Edad Media se elaboraba en España un preparado similar, llamado Almodrote y que aparece nada más y nada menos que en El Quijote.
La explicación del cómo y por qué desapareció esta rica pasta se la debemos a la Historia de nuestro país. La expulsión de los judíos y árabes por parte de los Reyes Católicos, tuvo repercusión en todos los ámbitos de la vida. Y la gastronomía consecuentemente, se encontró alterada y mermada.
Toda receta que hubiera estado en las cocinas hebreas y musulmanas, tenía que ser desterrada por completo. Y con el transcurso del tiempo cayó en el mayor de los olvidos. Haber quien era el guapo y valiente que se arriesgaba a ser acusado de no rendir como un buen cristiano, que ahí llegaba rauda y veloz la Santa Inquisición y ya sabemos cómo se las gastaba . . . . tararí que te vi.
Curiosamente, en el único lugar donde siguió presente y ha llegado hasta nuestros días, fue en La Gomera.{ Estoy convencida que la distancia fue el factor determinante }.
Con el cambio de una letra en su nombre, de ahí que sea Almogrote.
Y ahora, vamos al lío.
Me gusta hacerlo a mano y con cuatro ingredientes: queso, pimienta seca, aceite, y ajo. Nada más.
También hay quien le incorpora pimentón, otros incluyen tomate; de esta forma cunde más y suavizas sabores, aunque así no lo hago nunca. Pero todos ricos sin lugar a dudas.
*** Como el queso gomero fuera de Las Islas es difícil conseguirlo, se puede sustituir por queso de cabra que sea viejo.
*** Si te gusta el picante, le puedes añadir alguna guindilla, parecidas a las que nosotros llamamos pimienta picona. Pero entre el ajo y el queso, queda bien de pique, prueba y verás.
*** Las pimientas palmeras las puedes sustituir por pimientos choriceros o ñoras.
Y ajos y aceite hay por todas partes y muy ricos, así que ya cada uno, el de su zona.
* Lo primero será hidratar nuestras pimientas. Pondremos agua templada en un cuenco y las introducimos partidas por la mitad y sin las granillas. Las dejamos hasta que veamos que se puede separar la carne sin trabajo, las mías han estado poco mas de media hora.
* Rallamos el queso por la parte más fina del rallador, no importa si se nos escapa algún trocito, que encontraremos más tarde mientras untamos en el pan.
* Los ajos los machacamos en al mortero.
* Cuando las pimientas están hidratadas, le podemos quitar la carne con una cucharita y así eliminamos la piel, o las añadimos al mortero con piel. Yo saco la carne siempre, pero si a ti no te molesta, las mueles junto con los ajos así.
* Hora de reunir los ingredientes: En un cuenco ponemos el queso rallado, le añadimos la carne de las pimientas, los ajos machacados en el mortero, y con una cuchara vamos ligando la mezcla mientras añadimos el aceite poco a poco.
* Cuando veamos la mezcla untuosa, la tendremos lista.
* Si decides hacerlo en batidora: Remojas las pimientas palmeras y rallas el queso. Cuando están hidratadas, las pasas por la batidora, añades el ajo y el aceite, sigue batiendo y por último añade el queso, a partir de ahora utiliza una cuchara para mezclar bien los ingredientes y conseguirás tener el Almogrote listo en un momento.
Esta receta es un regalo para mi querido TITO { LAS SALSAS DE LA VIDA } ya que estoy segura que el Almogrote hubiera visto la luz en este blog tarde o temprano, porque en casa gusta mucho.
Pero surgió hacerlo, tras un comentario que le hice, al ver una rica salsa que él publicó y que me lo recordó bastante.
Así que TITO, como se que lo harás en breve porque tienes ingredientes para ello, espero que lo disfrutes, tanto como nosotros en casa.
Y antes de irme, contaros también que LAS SALSAS DE LA VIDA se presenta a los premios BITÁCORAS, como Mejor Blog Gastronómico; y que lo puedes votar AQUÍ .....así, que vengaaaa, deditos al teclado, que es un momento nada más.
Y eso es todo por hoy amigos, sean felices o al menos, inténtenlo.