Volvemos con otra receta colaborativa de Laura, que como buena valenciana hoy nos sorprende con un rico arroz.
Hoy os traigo la receta de un arroz muy típico de mi tierra, Valencia. No es tan conocido fuera de aquí como la paella, pero esta igual de rico o más.
A este arroz también se le conoce como "arroz passejat" (arroz paseado), porque hasta hace bien poco, al no disponer de horno en casa, las mujeres llevaban las cazuelas preparadas a los hornos de pan, para que les cocieran el arroz. Se cocina en una cazuela de barro.
Yo todavía recuerdo cuando acompañaba a mi madre cuando era pequeña a llevar la cazuela y ver cómo, con la ayuda de la pala, metían la cazuela dentro del horno de leña.
Este plato surgió de la necesidad de aprovechar los restos del cocido, como los garbanzos, la morcilla, la carne de cerdo, y el caldo.
Las cantidades que aquí os pongo son las que yo utilizo para cuatro personas. Pero aviso, sale mucho arroz, pueden comer seis. En casa lo devoramos y los platos son platazos. Así que calcular más o menos las cantidades al gusto.
Ingredientes:
- 6 vasitos o cazos de arroz
- 12 vasitos o cazos de caldo
- 1 bote de garbanzos pequeño
- 1 tomate maduro
- 1 cabeza de ajos
- 200 gr. de costillas de cerdo
- 150 gr. de panceta
- 2 morcillas
- 1 patata grande
- Tomate triturado
- Azafrán o colorante alimentario
- Sal
Pimentón dulce
Elaboración:
Precalentar el horno a 250 grados.
En una sartén sofreír las costillas de cerdo y reservar. Seguidamente sofreír la panceta, la cabeza de ajo, las morcillas y el tomate triturado o rallado. Reservar.
Con el aceite sobrante del sofrito, rehogamos el arroz con un poco de pimentón dulce.
Cortar las patatas y el tomate en rodajas.
Repartir el arroz uniformemente por la cazuela e ir añadiendo todos los ingredientes del sofrito, las morcillas, las costillas y la panceta. Agregar el caldo con el azafrán o colorante, y poner por encima los garbanzos, las patatas y el tomate en rodajas y la cabeza de ajo se pone en el centro. A la hora de cocinar el arroz no tenia por eso no la veis.
Meter en el horno a 250 grados durante 30-40 minutos. Ir mirando de vez en cuando porque el tiempo depende un poco de la potencia de cada horno.
Espero que os animéis a probarlo y os guste tanto como a mí.