La primera vez que probé el Banoffe Pie, a pesar de ser una tarta inglesa, fue aquí en España. Mis tías inglesas vinieron de visita y preparamos esta receta de Banoffe Pie sin lactosa, porque sabíamos que les gustaba mucho. Buaaaa, espectacular. Cuando la probé, me habría comido yo solo toda la tarta (aunque es imposible, y es que con un cachito ya vas más que empachado)!! Y es que con razón era la comida preferida de Margaret Thatcher :)
El Banoffe Pie es una tarta de plátanos, toffee y nata (crema de leche), sobre una base de galletas Digestive y mantequilla sin lactosa. La palabra "Banoffee" es la mezcla de "banana" y "toffee". Es de origen inglés, aunque es de historia reciente. Fue creada en 1972 por el cocinero del Pub "The Hungry Monk" (El monje hambriento) en la ciudad de Jevington (Eest Sussex), muy cerca precisamente del pueblo de mis tías Hastings y Bexhill, y de los impresionantes acantilados de "Seven Sisters Hills" (las colinas de las 7 hermanas)
No nos vamos a engañar jeje esta tarta es hipercalórica (8 millones de calorías más o menos jajaja) pero mira, está buenísima!!! es como darle un pequeño bocado al cielo, y a toda la corte celestial tocando el arpa jajaja Eso sí, sólo podemos comernos un pedacito.
Para empezar la base ya está hecha con mantequilla sin lactosa y crumbles de galleta digestive (también sin lactosa, aunque la mayoría de las marcas pueden llevar trazas de leche). Y luego está el relleno ¡¡Ay Dios mío qué relleno!! A base de rico plátano y..... lo mejor del mundo: el toffee.
Para hacer toffee casero normalmente usaríamos leche condensada o dulce de leche (que ya están muy reducidos y condensados, y en cinco minutos tendríamos el toffee). Pero como hasta la fecha no he encontrado ni leche condensada sin lactosa ni dulce de leche sin lactosa, para hacer nuestro toffee sin lactosa casero necesitamos nata (crema de leche) sin lactosa, aunque tengamos que dejarla reducir al menos 40 minutos a fuego medio, removiendo. Es algo cansino, sí, pero merece la pena muy mucho. El resultado es el mismo. Un pecado inconfesable que ojalá nunca hubiese descubierto jajaja
Después la tarta se culmina con nata montada (crema de leche) sin lactosa (la decoración ya al gusto) y chocolate negro sin lactosa (la mayoría de las marcas pueden llevar trazas de leche), rallado en láminas a modo decorativo.
La tarta es espectacular, la mires por donde la mires. Creo que todos deberíamos probarla alguna vez (ya no hay excusa, ni siquiera por la dieta... luego te vas a correr una hora y listo jejeje)
¡A disfrutarla!