Esta es una de esas recetas que no probaría ni que me pagaran. Las berenjenas no me gustan nada de nada, pero como mi suegra las planta, pues de vez en cuando me da, sólo para su hijo, claro, porque el peque rara es la vez que come.
Cada vez intento hacerlas diferente para que mi marido haga de conejillo de indias ;-)
Estas os las recomienda, eso si recién hechas, porque luego el rebozado se queda blanducho y pierden toda la gracia.
Ingredientes:
1 berenjena
143g de harina
200g de agua
1/2 vaso de cubitos( 2 cubitos de los grandes)
7,5g de pimentón
Preparación:
Lavamos la berenjena y la cortamos a rodajas, la salamos y la disponemos sobre un plato, donde reposará como poco 1h para que vaya soltando todo el ácido.
Vamos preparando el rebozado: Mezclamos el agua con la harina y el pimentón, mejor si lo hacéis manualmente porque así no se calienta la mezcla, que al ser similar a la tempura lo que quiere es frío.
Cuando tengamos una masa cremosa, añadimos los cubitos de hielo movemos, y empezamos a rebozar las rodajas de berenjena sacudiéndolas previamente para que echen las gotitas que tendrán por la superficie.
Freímos con aceite bien caliente y servimos inmediatamente.