Las berlinas rellenas de crema pastelera son, seguramente para muchos, un recuerdo de la infancia. Aunque en mi casa muy raramente nos compraban pasteles o bollería, o seguramente por eso, los susos, berlinesas o berlinas son unos de mis dulces preferidos. Por eso no perdono, aunque sólo sea una vez al año, el preparar este pastel en casa. Me olvido por un día de las grasas y las calorías y me pongo a disfrutar con este bollo de masa frita rellena de crema pastelera, uno de mis vicios confesables.
Aunque el proceso de elaboración es largo, no requiere un trabajo real excesivo salvo el hecho de tener que estar pendiente de las diferentes fermentaciones de la masa. El resultado es un pastel casero riquísimo que nada tiene que envidiar a las berlinas o susos que podamos comprar en cualquier pastelería.
RACIONES: 10 ud.
DIFICULTAD: media
TIEMPO: 6 horas
BERLINAS RELLENAS DE CREMA:
250 gr. HARINA DE FUERZA
1 HUEVO L
30 gr. MANTEQUILLA A TEMP. AMBIENTE
50 gr. AZÚCAR
15 gr. LEVADURA FRESCA
RALLADURA NARANJA
100 ml. AGUA
SAL
SEMILLAS CARDAMOMO (3 VAINAS)
ACEITE DE GIRASOL PARA FREIR
AZÚCAR PARA REBOZAR
CREMA PASTELERA
1.- Comenzaremos preparando la crema pastelera. Así la tendremos lista para utilizar en cuanto las berlinas se hayan enfriado. En el siguiente post podéis encontrar la receta.
2.- En un bol mezclamos todos los ingredientes dejando sólo fuera la mantequilla. Las semillas de cardamomo las retiraremos la la vaina y las machacamos en un mortero antes de añadirlas. Comenzamos a mezclar con la ayuda de un tenedor y, cuando estén más o menos integrados volcamos la masa sobre una superficie de trabajo.
3.- Amasamos durante unos 10 o 12 minutos hasta que tengamos una masa manejable y que no se nos quede pegada a las manos al trabajarla.
4.- Añadimos la mantequilla a la masa y seguimos el proceso de amasado. nuestra estupenda bola manejable se convertirá, por unos minutos, en una pasta chiclosa e intratable. No os preocupéis, con el trabajo de amasado la masa acabará absorbiendo toda la grasa y nos quedará una bola brillante y lisa.
5.- Dejamos la masa en un bol ligeramente engrasado y tapada con un paño, en un lugar cálido hasta que fermente doblando su volumen, lo que nos llevará unas 2 horas. Un lugar perfecto sería el interior el horno templadito y apagado.
6.- Pasado este tiempo volcamos la masa sobre una superficie y la trabajamos unos segundos. Así eliminaremos el gas que habrá acumulado en su interior en la fermentación. volvemos a ponerla en un bol engrasado y la tapamos con papel transparente. Guardamos la masa en el frigo de un día para otro.
Podemos sustituir esta fermentación lenta dejándo la masa de nuevo en un lugar cálido durante unas 3 horas para que vuelva a fermentar. yo prefiero la opción del frigo porque así divido el trabajo en dos días.
7.- Si habéis optado por la versión larga, a la mañana siguiente retiramos la masa del frigo y la dejamos que se atempere durante 1 hora antes de comenzar a trabarla de nuevo.
Volcamos la masa sobre una superficie de trabajo ligeramente enharinada y la dividimos en porciones de unos 45 gr. cada una. Trabajamos la masa hasta formar unas bolitas lisas y las vamos colocando en una bandeja de horno sobre un papel sulfurizado.
8.- Dejamos que fermenten de nuevo durante 2 horas en un lugar cálido, de nuevo el interior del horno templado es un sitio perfecto.
9.- En una sartén con fondo o una cazuela, calentamos abundante aceite. es necesario bastante cantidad ya que las berlinas deben de quedar flotando sin tocas el fondo. Con una tijera recortamos el papel sulfurizado o de horno sobre el que tenemos nuestras berlinas, y lo utilizamos para ir trasladándolas a la sartén. La base de papel nos ayudarán en este proceso ya que evitará que se deformen o pierdan aire.
Dejamos las berlinas, con cuidado, en el aceite caliente y les retiramos el papel.
10.- Freímos a temperatura media, para que lleguen a cocinarse bien por el interior. Cuando vemos que están doradas les damos la vuelta y continuamos la fritura.
11.- Retiramos los bollos a una bandeja con papel absorbente para retirar el exceso de aceite y pasamos inmediatamente a un plato con azúcar para rebozarlas. dejamos que se enfríen totalmente antes de rellenarlas.
12.- Una vez que tenemos las berlinas frías les hacemos un corte lateralmente y, con la ayuda de una manga pastelera, las rellenamos de crema. si no tenemos manga podemos poner la crema en una bolsa de plástico a la que le cortaremos una de sus puntas o simplemente intentar darnos un poco de maña con una cuchara.