Bizcocho tradicional y típico donde los haya para servir en un buen desayuno. Mi madre lo hace mucho, y cuando voy a su casa me encanta comerlo con el café matutino.
Es una receta que tiene apuntada desde siempre, no se acuerda de donde la sacó o quien se la enseñó así que yo lo llamo el bizcocho de aceite de mi madre.
Para usar toda la masa en un mismo bizcocho, debéis hornearlo en un molde grandote tipo bundt cake por ejemplo. Yo en esta ocasión hice 2 cakes medianos ya que para uno grande es mucha masa. En dos queda perfecto.
Es esponjoso a la vez que jugoso con un toque húmedo. Podéis cambiar el limón por naranja, añadir unas pepitas de chocolate... es una muy buena base para jugar.
INGREDIENTES
2 huevos tamaño L
250 gr azúcar
200 ml aceite de oliva virgen
200 ml leche entera
375 gr harina
1 sobre y 1/2 de levadura
Ralladura de 1 limón
Canela en polvo y azúcar glass para servir
ELABORACION
Batimos los huevos con el azúcar hasta que doblen su volumen, bien batidos.
Añadimos el aceite en forma de hilo sin dejar de batir hasta que esté bien incorporado.
Hacemos el mismo paso anterior con la leche.
Tamizamos la harina junto a la levadura y la incorporamos poco a poco con movimientos suaves y envolventes.
Añadimos la ralladura de limón.
Vertemos la masa en el molde previamente engrasado y horneamos a 160º. Dependiendo del horno tardará más o menos, yo en 40 minutos aproximadamente lo tengo listo. Debéis ir vigilando y pinchando con un palillo.
Espolvoreamos un poquito de canela por encima antes de servir.