Este bizcocho de arándanos y nueces está buenísimo, y no solo porque lo diga yo, sino porque ha desaparecido de la mesa en un santiamén. La masa resulta esponjosa una vez horneada, pero con el punto de jugosidad que aportan los arándanos. El toque especiado del jengibre le confiere un sabor muy especial y las nueces que iremos encontrando en cada bocado lo convierten en un dulce muy tentador. Tomad buena nota y no os perdáis la receta.
INGREDIENTES:
400 gr de harina
250 gr de azúcar blanca
2 huevos
2 yogures naturales
130 ml de aceite de oliva
1 cucharadita de jengibre molido
1/2 sobre de levadura en polvo (7 gr )
1/2 cucharada de bicarbonato
125 gr de arándanos
100 gr de nueces peladas y troceadas
mantequilla (para el molde)
ELABORACIÓN:1. Precalentamos el horno a 180º.
2. En un cuenco amplio tamizamos la harina y la levadura. Encima ponemos el azúcar, el bicarbonato, y el jengibre.
3. Agregamos los yogures, los huevos y el aceite. Mezclamos con las varillas eléctricas, primero a velocidad baja y cuando comiencen a estar los ingredientes integrados a velocidad media.
4. Incorporamos las nueces troceadas y los arándanos. Mezclamos con una cuchara de madera para que se repartan bien.
5. Engrasamos un molde rectangular con mantequilla (de tamaño más bien grande: 30 x 24 cm) y volcamos en él la masa alisando la superficie.
6. Horneamos a 180º durante 30 - 35 minutos, o hasta que al pinchar el bizcocho con una varilla metálica ésta salga limpia.
¡Buen provecho!!!
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