Hoy estoy encantada, me gusta el cabello de ángel, de hecho me encanta, pero la verdad es que me parecía un poco limitado el tener que utilizarlo sólo, que no es poco, como relleno de hojaldres, galletas u otras masas. Me apetecía preparar algo de cabello de ángel, no sólo con. Así que hoy os traigo un bizcocho de cabello de ángel que os prometo que está de muerte.
Si tenéis en casa algún tarro en conserva de cabello de ángel, de esos que preparasteis cuando estábamos en temporada y no queréis hacer siempre la misma receta dulce, os recomiendo este bizcocho. La textura es muy esponjosa, húmeda, dulce y nada pesado, con una costra superior de azúcar que le queda perfecto, una maravilla. Desde ya estoy enganchada a este dulce. Ahora sólo me queda conseguir más calabazas y ponerme manos a la obra de nuevo, me ha encantado.
Si os apetece probar a preparar el cabello de ángel, en el blog podéis encontrar la receta, pero si no podéis esperar para hacer esta bizcocho, en las grandes superficies podréis encontrar cabello de ángel ya preparado, que eso no os frene.
Bueno, ahora en serio, como últimamente estoy en modo bizcochil, sólo puedo decir que estaba buenísimo.
RACIONES: 15
DIFICULTAD: baja
TIEMPO: 1 hora
BIZCOCHO DE CABELLO DE ÁNGEL:
300 gr. HARINA
3 HUEVOS
200 gr. AZÚCAR
200 ml. NATA (crema de leche)
1 SOBRE DE LEVADURA QUÍMICA
200 gr. CABELLO DE ÁNGEL
150 gr. MANTEQUILLA
RALLADURA LIMÓN
ZUMO 1 LIMÓN
1 PIZCA DE SAL
AZÚCAR PARA ESPOLVOREAR
1.- En un bol mezclamos los ingredientes secos del bizcocho, la harina, la sal y la levadura química. Reservamos.
2.- En un bol grande batimos los huevos con el azúcar hasta que tengamos una mezcla espumosa. Añadimos la nata (crema de leche) y la mantequilla derretida y batimos bien hasta mezclar. Incorporamos la ralladura de limón, el zumo y el cabello de ángel. Removemos hasta que se integren bien todos los ingredientes.
3.- Añadimos la harina y con unas varilla integramos los ingredientes secos con los líquidos hasta que estén integrados. No es necesario batir mucho la mezcla, cuando estén integrados estará listo.
4.- Untamos un molde con mantequilla y lo forramos con papel de horno, lo que nos permitirá desmoldar el bizcocho con total facilidad una vez cocido. Vertemos la crema y espolvoreamos toda la superficie del bizcocho con abundante azúcar. Esto formará una costra crujiente durante el horneado.
4.- Con el horno previamente caliente horneamos el bizcocho a 180ºC durante 50 minutos. Comprobamos que esté cocinado pinchándolo con un palito, si este sale limpio el bizcocho estará listo. Dejamos enfriar sobre una rejilla dentro del molde durante 5 minutos y desmoldamos. Lo mantenemos sobre la rejilla hasta que se haya enfriado totalmente.
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