Ya huele a Navidad.. fiestas para estar en familia, cocinar, pasarlo bien...?
A muchas personas -incluso de mi familia- no les gustan estos días y desearían que pasasen rápido.
¿Por qué? pues porque son fechas en las que se suelen reunir con gente que no soportan o con los que no tienen roce el resto del año, pero principalmente porque se echa de menos a los seres queridos que ya no están entre nosotros.
A mi me encanta la Navidad, adviento: ese tiempo de esperanza, preparación para la llegada de la "Buena Nueva". Siempre lo he celebrado con mucha ilusión.. con todos los seres queridos de pequeña, y cada año que pasa con los que vamos quedando, que recordamos a los que se van yendo.
Estas Navidades hemos tenido algunos contratiempos que -Gracias a Dios- van encaminandose para llegar a buen término. Mi madre ha sido operada de cataratas y ha tenido un accidente quirúrgico, así que está sin ver de un ojo y esperando una próxima operación para recuperar la vista.
La verdad es que ha sido un accidente, y su oculista es el mejor (amigo y profesional) que podría tener, pero estas cosas pasan.. y le ha tocado a ella. Asi que lo que toca es llevarlo con resignación (y mucha paciencia porque.. admitelo mamá.. eres muy patosa!)
Y aqui estamos ahora, dando gracias que solo es una complicación pasajera, que no se nos dan cruces más grandes de las que podemos soportar y que la vida sigue (a pesar de los catastrofistas que se amparan en los Mayas)
Así que yo sigo preparando recetas para estos dias, diferentes, apetecibles, y que os recomiendo totalmente ya que la casa queda con un aroma típico a Navidad.
Y si me preguntais a qué huele la Navidad yo os digo.. a familia (amor), a arrepentimiento y perdón (paz), a respeto (tolerancia) y a la certeza de lo que se espera: la convicción de lo que no se ve (fe)
Con mis mejores deseos de amor, paz, tolerancia y fe os dejo la receta de este bizcocho de especias y frutas pasas, muy esponjoso, perfecto para tomar con un vino caliente, un licor dulce, un mosto, té o café. FELIZ NAVIDAD!!
Ingredientes:
125 gramos de mantequilla
150 gramos de azúcar
3 huevos
125 gramos de harina (yo le puse harina normal de trigo, de todo uso)
1 cucharadita de levadura quimica, levadura en polvo.
2 cucharaditas de canela molida
1 cucharadita y media de clavo molido
1 cucharadita de nuez moscada
1/2 cucharadita de cardamomo (si no encontrais podeis poner anís molido, en polvo)
Una pizca de sal
Un puñado de uvas pasas y orejones (cortados en daditos pequeños, pero es opcional)
Preparación:
Todas las especias tienen que estar en polvo, molidas. Si no las teneis.. las pasais por una picadora, muy muy bien trituradas y las pasais por un colador o tamiz.
En un bol mezclais la mantequilla a temperatura ambiente con el azúcar y batís un rato.
Añadís los huevos uno a uno sin dejar de batir, no añadiendo el siguiente huevo hasta que el anterior no esté bien integrado.
Mezclamos la harina con las especias, la levadura y la sal, lo tamizamos y lo vamos añadiendo con cuidado, mezclando bien con una espátula.
Añadimos las frutas pasas y lo ponemos en un molde de plum-cake enharinado (yo lo que hago es forrar el molde con papel de horno, queda muy bonito al desmoldar porque las arrugas del papel le dan un toque rústico)
Lo llevamos al horno precalentado a 175º durante 35/40 minutos (el mio cocina rápido) calor abajo y los últimos 8-10 minutos calor arriba y abajo.
Nota: El tiempo del horno es orientativo. El mío cocina rapidito así que probablemente necesiteis unos 50 minutos.
Ponedlo 40 minutos calor abajo y luego calor arriba y abajo, y cuando esté doradito ya podeis abrir con cuidado y pincharlo para ver si le falta algo más de tiempo.