Una forma de introducir las verduras a los más reacios, es dándole forma de croqueta o albóndiga y servirlas con alguna salsa que le vaya bien. Se podrían rebozar con huevo y freírlas, como si fuera la masa de albóndigas de bacalao, pero así también están muy buenas y no utilizamos ni una gota de aceite.
Con estas cantidades me salieron 46 bocaditos:
-una coliflor pequeña
-3 huevos
-150 g. de 4 quesos rallados
-4 lonchas de jamón serrano
-sal
-1 cucharadas de ajo y perejil
Lavamos la coliflor y la picamos, incluídos los troncos.
La metemos en el microondas durante 30 minutos a máxima potencia removiendo cada 10 minutos.
Le agregamos el resto de ingredientes, menos el jamón y tritutamos.
Picamos el jamón y mezclamos con la masa.
Rectificamos de sal y dejamos entibiar. Introducimos en la nevera para que coja cuerpo.
Con la ayuda de dos cucharas le damos forma de albóndigas. Las ponemos sobre dos bandejas de horno forradas con papel de hornear.
Introducimos en el horno precalentado a 200ºC durante 40 minutos o hasta que estén doradas.
Emplatamos con alguna salsa, la mía mahonesa con una pizca de salsa Louisiana.
Fuente: este post proviene de Recetecum, donde puedes consultar el contenido original.
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