En mi empeño por no comer, o comer lo menos posible, cosas industriales, trato de conseguir acercarme lo más posible a productos conocidos del mercado y que, cómo no, a los niños les encantan... La masa para estos bollitos es parecida a la de cualquier otra receta de masa fermentada, como los donuts, el panettone, el roscón de reyes... es decir, utilizamos harina de fuerza, levadura de panadería y le hacemos dos levados. Puede parecer tedioso, ya que con las cantidades que os doy, sólo salen 8 unidades, pero en realidad no tienen tanto trabajo, así que podemos doblar las cantidades si queremos: podremos conservarlos dos o tres días a temperatura ambiente dentro de un recipiente hermético, de vidrio, una campana de cristal...
Os confieso que antes de probar el que me iba a comer primero, me pasé un buen rato hundiendo el dedo en la superficie y viendo cómo volvía a su forma (jijiji), lo que os da una idea de lo esponjosos que quedan por dentro...
Ingredientes:
- 115 ml de leche a temperatura ambiente
- Medio cubito de levadura fresca (serían unos 12 gramos, el otro medio cubito podemos emplearlo, por ejemplo, para hacer pan de molde)
- 1 huevo L batido
- 30 gramos de aceite de girasol
- 1 cucharadita de vainilla líquida o de azúcar vainillado
- 50 gramos de azúcar blanco
- 250 gramos de harina de fuerza
- Pizca de sal
- Pepitas de chocolate (al gusto)
Elaboración manual:
1. En primer lugar, calentamos unos segundos la leche en el microondas para que esté tibia (pero no caliente), y disolvemos en ella la levadura.
2. En un bol, ponemos la harina tamizada y hacemos un hueco en el centro donde pondremos la sal, la mezcla de leche y levadura, aceite, vainilla, azúcar y el huevo batido (reservando de éste una cucharada para pincelar los bollos antes de hornear).
3. Mezclamos todo muy bien con ayuda de una espátula, la masa quedará bastante pegajosa.
4. La pasamos a otro bol untado previamente con aceite y lo cubrimos con film transparente. Dejaremos que repose para que se efectúe el primer levado. Dependiendo de la temperatura ambiente, este proceso llevará entre 30 minutos y 2 horas.
5. Una vez que haya doblado su volumen, vertemos la masa en una superficie enharinada y amasamos un poco para desgasar.
6. Dividimos la masa en 8 porciones, nos untamos las manos de aceite y en cada porción ponemos un puñadito de pepitas de chocolate, dándole forma de bola a la masa.
7. Colocamos las bolas en la bandeja del horno, previamente forrada con papel vegetal y cubrimos de nuevo con papel film para que haga el segundo levado, hasta que doblen su volumen.
8. Pasado este tiempo, ponemos a calentar el horno a 180º C, con calor arriba y abajo. Mientras, vamos pincelando la superficie de cada bollo con el huevo batido que teníamos reservado y, cuando el horno esté listo, horneamos nuestros bollos unos 12-15 minutos, dependiendo de cada horno, pero sin dejar que se doren demasiado. Sacamos del horno y dejamos enfriar a temperatura ambiente antes de hincarles el diente...jejeje.
Elaboración en thermomix:
1. Ponemos en el vaso la leche con la levadura desmenuzada y calentamos 3 min/37º/vel 3.
2. Añadimos el resto de ingredientes, excepto las pepitas de chocolate (y reservando también una cucharada del huevo batido) y amasamos 3 min/vel. espiga.
3. Vertemos la masa en un bol untado con aceite y tapamos con el film transparente. A partir de aquí los pasos son exactamente igual que en la elaboración manual.
Nota:
- Si queréis hacerlos con más chocolate aún, podéis añadir, en el momento de agregar la harina, una cucharada de cacao puro en polvo.