El pan brioche es un pan dulce de origen francés. Entre sus ingredientes se encuentra la mantequilla, aunque se puede sustituir por mascarpone como he hecho yo en esta receta. Es muy importante utilizar un buen mascarpone, pero si tienes que hacerlo con el que venden en tu supermercado, no te preocupes que te va a salir genial, aunque con un poco menos de sabor.
Cuando me meto en la cocina, una de las cosas que más me gusta es amasar. Trabajar los ingredientes y verlos como por pura alquimia reaccionan y se transforman me entusiasma, además de lo contentos que se ponen todos en casa cuando empiezo a cacharrear y empieza a salir el olor a bollería de la cocina.
Si te preocupa tener que amasar un brioche no te preocupes porque esta receta no tiene ninguna dificultad. Una vez que tenemos la masa levada y desgasada la tienes que bolear... y ¿que es bolear? si eres principiante y no lo has hecho nunca yo te lo voy a explicar y verás que no es difícil. Vale la pena dedicar unas horas en preparar un brioche...¿has visto que miga tan tierna y esponjosa? se me hace la boca agua.
Por encima le puedes espolvorear azúcar glas o un glaseado con nata (crema de leche) como le he puesto yo y ya tienes un brioche casero suave que al no ser demasiado dulce lo puedes acompañar de algo salado o con mantequilla y mermelada.
INGREDIENTES
1 huevo
250 gr. de queso mascarpone
520 gr. de harina de fuerza
120 gr. de leche entera
80 gr. de azúcar glas
25 gr. de levadura fresca para panadería
una pizca de sal
una cucharadita de esencia de vainilla
ELABORACIÓN
Batir en un bol el huevo, el queso, el azúcar, la vainilla y la leche templada hasta que esté todo bien mezclado.
Añadir esta mezcla a la harina, la sal y la levadura desmigada y empezar a amasar. Seguir amasando hasta obtener una masa elástica que no se pega en las manos, si tienes una máquina de amasado te facilitará el trabajo. Dejar levar la masa dentro del bol tapado con un paño unas tres horas en un sitio con una temperatura caldeada y sin corrientes de aire. Volcar la masa en una mesa de trabajo y con el puño, apretar la masa para desgasarla. Preparar un molde desmontable de unos 24 centímetros con papel de horno en el fondo y las paredes ligeramente engrasadas. Ahora tendrás que bolear la masa para formar el brioche. Cortar la masa en seis porciones lo más iguales posible y trabajar doblando muchas veces las masa cogiendo el borde de fuera hacia dentro formando una bola. Cuando la hayas trabajado un buen rato dale al vuelta a la bola y con las dos manos hacerla girar sobre sí misma. Cuando ya las tengas todas, colocarlas en el molde formando una corona. Dejar reposar una hora más, la masa volverá a crecer. Precalentar el horno a 180ºC . Pasada la hora, hornear durante 35 minutos con calor arriba y abajo, yo también le he puesto aire. Si ves que a falta de 10 minutos se dora demasiado, cubre el brioche con un papel de aluminio y termina de hornear. Sacalo del horno y deja enfriar sobre una rejilla. Desmoldar y espolvorear azúcar glas o un glaseado de azúcar (tres cucharadas de azúcar glas con un chorrito de nata (crema de leche) bien mezclado).
... BE SWEET!!!