Ayer fue el día de la Mona. Si, si, esa tradición tan maravillosa que tenemos en Catalunya. Esa que dice que la madrina regala la figura de chocolate a su ahijado. Y esa que engorda a toda la familia por igual. Yo me niego a pagar un dineral por una lámina de chocolate de nada. Cuando era pequeña hacían unas monas espectaculares. Ahora se limitan a poner fotos en una lámina de chocolate y te piden de 30€ para arriba.
Pero... para algo me gusta la cocina, no? Pues eso, que cada año me exprimo la cabeza para hacer la mona diferente. Se la hacía a mis sobrinos, aunque no soy su madrina, y resultaba que tenían tropecientas monas. El año pasado decidí que no se la volvía a hacer, ya sabéis que en todas casas cuecen habas...
Pero como Eneko, mi otro sobrino y ahijado, nació hace poco más de un año, pues no me libro! El año pasado le hice una tontería porque él no se enteraba, este año tampoco se entera demasiado, pero estaba segura que haciendo algo de colores se le iba a ir la mano, y era justo lo que yo quería!
Ingredientes:
185g de mantequilla
220g de chocolate del 70% troceado
200g de azúcar
50g de azúcar moreno
4 huevos
1 pellizco de sal
115g de harina
25g de cacao puro en polvo (tipo Valor)
100g de nueces troceadas
1 cucharadita de esencia de vainilla
Para la decoración:
1 tableta de chocolate blanco
Colorante naranja
8- 10 fresas
1 paquete de galletas oreo de las rellenas de crema de chocolate
1 Conejo de chocolate para ponerlo en medio del huerto de zanahorias.
Plumas y pollitos (indispensables para la mona)
Preparación:
Troceamos las nueces, más o menos grandes según os guste.
En un bol, apto para el microondas, ponemos la mantequilla y el chocolate fondant. Lo ponemos 1min a máxima potencia, sacamos y removemos. Si no se ha fundido del todo, vamos poniendo tiempos cortos y comprobando. Una vez bien fundido y mezclado, lo reservamos.
Mezclamos la harina, el cacao y la sal. Tamizamos y reservamos. Con la thermomix, es poner todo en el vaso, programar 20 segundos y velocidad 10.
En el mismo vaso de la thermomix ponemos los huevos y los dos tipos de azúcar. Mezclamos bien sin que le entre demasiado aire. A una velocidad 3-4 y sin mariposa es suficiente. El tiempo... hasta que veáis que está bien mezclado todo.
Añadimos la vainilla, la mezcla de chocolate y por último la mezcla de harina y las nueces, mejor si lo hacemos con una espátula y movimientos envolventes.
Lo ponemos en un molde y al horno, precalentado a 200º. Nada más meter el brownie, bajamos el horno a 175º.
En unos 25minutos estará hecho. Pensad que es un brownie, no va a subir en el horno, y al pincharlo para ver si está hecho, el palillo saldrá algo sucio.
El resto es decoración.
Lavamos las fresas, las secamos bien y reservamos.
Fundimos el chocolate blanco y vamos poniendo colorante hasta que tenga el color de las zanahorias.
Si ponéis el chocolate teñido en un vaso de chupito, sólo tendréis que meter las fresas y que queden bien bañadas.
Las ponemos sobre papel de horno y las llevamos a la nevera para que endurezcan.
Troceamos las galletas oreo y las ponemos por encima del brownie, colocamos las fresas de manera que parezca un huerto de zanahorias, y por último la figura de chocolate con forma de conejo.
Notas:
El brownie es un "bizcocho" que queda contundente, denso, pero sobretodo, es ideal para chocoadictos. Por cierto, si os gusta un poco más jugoso, tenéis dos opciones: bajar el porcentaje de cacao en el chocolate, pero como mínimo que sea del 55%, o añadir algo más de mantequilla, como unos 200-210g.
La receta original es de La cocina de los elfos
Lo mejor del día de la mona es ver la cara de los niños. No me digáis que no es felicidad pura!!!
Fuente: este post proviene de La Flor del Melocotón, donde puedes consultar el contenido original.
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