Esté bizcocho tiene una miga tierna y esponjosa y un intenso sabor a chocolate.
Ideal para comer en el desayuno o en la merienda con un buen café.
Os encantará!
(Para un molde de corona de 24 cm)
Ingredientes:
280 grs. de harina de trigo.113 grs. de mantequilla sin sal a temperatura ambiente.
250 grs. de azúcar.
4 huevos L.
237 ml. de buttermilk (si no lo encontráis podéis hacerlo en casa con 227 ml. de leche entera y 10 ml. de vinagre blanco, mezclamos y dejamos reposar 10 minutos a temperatura ambiente, estará listo cuando parezca que se ha cortado).
120 ml. de aceite de oliva suave o girasol.
60 grs. de cacao puro en polvo (sin azúcar).
2 Cdtas. de pasta o extracto de vainilla.
1 Cdta. de levadura química o polvos de hornear.
1/2 Cdta. de bicarbonato de sodio.
Una pizca de sal.
Azúcar glas para decorar.
Preparación:
Batimos la mantequilla junto con el azúcar y la pizca de sal a velocidad media, 5 minutos.Agregamos los huevos de uno en uno (cuando se haya integrado el primero añadiremos el siguiente).
Añadimos el aceite junto con la vainilla y batimos unos segundos más.
Tamizamos la harina junto con la levadura, el cacao en polvo y el bicarbonato, añadimos a la mezcla alternándola con el buttermilk, batiendo a la velocidad más baja que tenga la batidora.
Engrasamos el molde, vertemos la masa, alisamos la superficie y le damos unos golpecitos al molde sobre la encimera para asentar la masa.
Metemos en el horno precalentado a 170° grados, 55 minutos aproximadamente.
Comprobamos que está hecho pinchando con un palito, debe salir limpio, de no ser así, dejamos unos minutos más.
Sacamos del horno y dejamos reposar sobre una rejilla 10 minutos.
Pasado el tiempo desmoldamos sobre la rejilla y dejamos enfriar por completo.
Una vez frío espolvoreamos con azúcar glas.