Seguimos poniéndonos al día con el blog y en esta ocasión voy a dejarte una receta que ha tenido un tremendo éxito, no sólo con quienes la han probado, sino también con quienes la han preparado.
Después de llevar este bundt al trabajo tuve que enviar el mismo día la receta a varios compañeros porque quedó realmente delicioso.
Esponjoso y a la vez muy jugoso. Se come prácticamente solo. Además lleva muchiiiiísima zanahoria (me encantan los dulces que la llevan)
Los ingredientes que necesitamos son:
350 grs. azúcar moreno
4 huevos L
250 ml. aceite vegetal
1 cucharadita rasa de canela
280 grs. de harina simple de trigo
6 grs. levadura en polvo
8 gr. bicarbonato
1 pizca de sal
500 grs. de zanahoria rallada
Ingredientes para la cobertura:
50 grs. de queso tipo crema
1 cucharada de mantequilla sin sal a temperatura ambiente
125 grs. de azúcar glas tamizada
1 ó 2 cucharadas de leche (si lo quieres más líquido)
Un puñado de nueces para decorar
Batimos el azúcar y los huevos hasta que estén esponjosos.
Sin dejar de batir añadimos el aceite despacito.
Incorporamos la canela.
Tamizamos la harina, la levadura, el bicarbonato y la sal y lo añadimos.
Por último ponemos la zanahoria rallada.
Pasamos al molde y horneamos a 180º hasta que al pinchar con un palillo salga limpio. Unos 50 minutos aproximadamente.
Una vez lo hayamos desmoldado dejaremos que enfríe sobre una rejilla. Mientras preparamos la cobertura.
En un bol batimos, con la batidora de varillas, el queso con la mantequilla y añadimos el azúcar glas tamizada, de dos veces, hasta que la mezcla haya blanqueado.
Si prefieres una cobertura algo más líquida, similar a un glaseado clásico, añade una o dos cucharaditas de leche hasta que tengas la consistencia adecuada.
Cubrimos con ella nuestro bizcocho y adornamos con las nueces picadas antes de dejarlo en la nevera.
Yo normalmente no refrigero los bizcochos pero en este caso lo hice por llevar la crema de queso y no deslució para nada el resultado a la hora de degustarlo.
¿Lo quieres SIN LACTOSA? Espolvoréalo con azúcar glas en vez de cubrirlo con queso y listo.
Hazlo y luego me cuentas. Verás los comentarios de los que lo degusten.
Fuente: este post proviene de Blog de Dulcespecados, donde puedes consultar el contenido original.
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