Pero si tengo que quedarme con postres para estas fechas, por supuesto y sin dudarlo, me quedo con las gachas, los huesos de santo y los buñuelos de viento.
Cuando estaba decidiendo cuál de los tres hacía, me quedé sin la primera opción ya que las hizo mi madre. Al tener solo dos para elegir y debido a la escasez de tiempo que tenía, opté por la receta más fácil y rápida...los buñuelos.
Respecto a origen de la receta hay diversidad de opiniones, unos dicen que es árabe, otros que la palabra proviene de los romanos y en Wikipedia indican que son de procedencia judía...La verdad es que da igual, el resultado es una bolita de masa frita en aceite, rebozada en azúcar y que podéis rellenar a vuestro gusto o dejarla tal cual.
Además admite multitud de variantes en sus ingredientes, canela, ralladura de naranja o limón, licor, etc. En nuestro caso hicimos la receta de Cocina.facilisimo pero tuneándola, para eso añadimos un poquito de Pedro Ximénez...haciendo patria de uno de tantos vinos buenos que tenemos en Córdoba...
Ingredientes
250 ml de agua
125 gr de mantequilla (no hace falta que esté a temperatura ambiente)
1 tsp de azúcar blanquilla (también podéis usar azúcar moreno)
1 tsp de levadura química en polvo (tipo Royal)
150 gr de harina
3 huevos tamaño L
2 tsp de vino dulce Pedro Ximénez
Un pizquito de sal
Aceite para freir
Azúcar para rebozar
Elaboración
Poner en un cazo el agua a calentar a fuego medio.
Añadir la mantequilla, azúcar, levadura y sal. Remover hasta que se disuelva evitando que llegue a hervir.
Retirar del fuego para añadir la harina.
Mezclar todo bien mientras se incorpora de nuevo al fuego hasta que la masa se vaya despegando de la pared del cazo (tarda muy poco)
Retirar del calor y esperar unos minutos para que pierda temperatura.
Incorporar el Pedro Ximénez y los huevos uno a uno, mezclando hasta integrar y conseguir una textura cremosa.
Freir en abundante aceite, pasándolos a papel absorbente para eliminar el excedente.
Rebozar en azúcar mientras están calentitos.
Si tal y como cuenta alguna leyenda, cada vez que comes uno salvas un alma del purgatorio, en mi familia este finde hemos salvado unas cuantas, porque además de esa fuente, salieron docena y media más que fueron a parar a casa de mi hermano y de mi madre...y eso que como podéis comprobar algunos eran grandecitos...
La próxima vez a lo mejor nos decidimos por rellenarlos o añadirle al azúcar una poquita de canela para rebozarlos...Qué os parece???
Esperamos la fotos de vuestros buñuelos!!
Hasta el próximo sueño.