INGREDIENTES (1 persona):
- 1 calabacín mediano
- 1 puñado de gambas frescas o congeladas peladas
- 1 cebolla pequeña
- 1/2 pimiento rojo
- 1 diente de ajo
- 1 tomate mediano
- 1 cucharada de tomate frito
- 2 cucharadas de aceite de oliva (AOVE)
- sal
- pimienta
- queso rallado
ELABORACIÓN:
Primero lavamos y cortamos el calabacín por la mitad. Podemos cocinarlo en una olla con agua y sal, hasta que estén cocidos y blanditos, o hacerlos al microondas. Si lo hacemos al microondas, debemos hacerle unos cortes con un cuchillo, para poder vaciarlos bien luego.
Lo metemos al microondas tapado con la tapadera de agujeritos durante 6 minutos a máxima potencia.
Los sacamos, dejamos enfriar un poco y los vaciamos con una cucharita. Reservamos.
Por otro lado hacemos el sofrito. Cortamos la cebolla, el pimiento, el ajo y el tomate en brunoise. Pochamos las verduras en una sartén con aceite de oliva (poco). Primero el ajo, el pimiento y la cebolla, y cuando vayan tomando algo de color, añadimos el tomate, ya que tardará menos en cocinarse. Cuando esté todo casi pochado, añadimos el interior del calabacín que hemos extraído antes con la cuchara. Salpimentamos al gusto y removemos para mezclar todo bien. Dejamos cocinar unos 2 minutos más y añadimos las gambas y el tomate frito. Cuando las gambas estén listas (no crudas), apartamos del fuego. Rellenamos con la mezcla las mitades del calabacín, ya vacías, y espolvoreamos con un poco de queso rallado.
Metemos el horno precalentado a 180º y gratinamos.