Ay, ay, ay que llevo un atraso con las entradas de miedo. Estoy con una gripe de miedo pero por fin hemos guardado el árbol de Navidad que ya era hora y ha sido cuando me he acordado de los canelones. En un principio pensaba no publicarlos porque para hacer la foto todo eran impedimentos pero al fin... aquí los dejo. En Cataluña han sido el plato estrella en muchos hogares estas fiestas navideñas. Yo he estado un tiempo sin hacerlos en casa ya que no encontraba pasta segura que me gustara. Lo que suelo hacer es preparar bastante carne guisada y guardarla en recipientes individuales para 18 canelones en el congelador. Así suelo hacer nada mas la bechamel y a gratinar.
Ingredientes para 18 canelones:
18 canelones
200gr de queso especial gratinar
Para la carne: (de estas cantidades sueles salir 6 raciones de 500gr o lo que equivale a unos 18 canelones)
1kg de carne de cerdo de la cabezada
1kg de carne de ternera melosa
1kg de pechugas de pollo
dos dientes de ajo
una o dos cebollas grandes (a gusto)
un tomate maduro
un vaso de vino blanco+ un poco de coñac
caldo de carne (aproximadamente 1l o hasta cubrir la carne)
sal, pimienta, canela molida (opcional y muuuy poquito)
Para la salsa bechamel:
una cebolla pequeña
3 cucharadas de harina
50gr de mantequilla + 50ml de aceite de oliva
750ml de leche entera
Cortamos la carne en trozos grandes, salpimentamos y ponemos a dorar a fuego fuerte con un poco de aceite. Cortamos la cebolla, los ajos y el tomate y añadimos a la carne una vez haya adquirido algo de color. Añadimos la pizca de canela (en caso de ponerla), el vino blanco y el caldo (o agua) hasta cubrir la carne por competo y dejamos cocer a fuego muy lento hasta que este totalmente melosa y prácticamente se deshaga. Habrá consumido la cantidad de líquidos casi por completo pero tener en cuenta que nos hará falta una parte para triturar la carne así que no dejéis que quede seca. Yo suelo preparar la carne a fuego lento en una cacerola semitapada pero también se puede hacer en la olla exprés (habría que disminuir las cantidades). Una vez cocida la carne trituramos bien con el turmix hasta obtener una pasta. En mi caso como ya os dije una vez fría suelo congelar la en raciones de medio kilo.
Ponemos los canelones a hervir en agua con sal y un poco de aceite y mientras preparamos la bechamel. Si no os gusta el sabor de la cebolla podéis prescindir de ella pero con ella la salsa queda muy gustosa. En una sarten ponemos el aceite y la mantequilla y doramos la cebolla picada. Cuando haya cogido color añadimos la harina (si tenemos suficiente aceite evitaremos los grumos de la harina) freimos un poco hasta que empiece a cambiar de color que es cuando incorporaremos la leche. Salamos a gusto y empezamos a remover sin parar hasta que rompa a hervir. Dejamos un minuto mas después de empezar a hervir y podemos apartar del fuego. Yo aquí le suelo pasar el turmix de nuevo para conseguir una salsa perfectamente lisa y suave sin grumos ni tropezones de cebolla.
Una vez esten listos los canelones los sacamos en la encimera con la ayuda de una espumadera (hay gente que los suele poner encima de trapos de cocina pero yo he comprobado que son mucho mas fáciles de manejar humedos. Os adjunto alguna foto porque es mas sencillo de lo que parece.
En la carne añadimos a cucharadas de la salsa bechamel hasta que quede una masa ligeramente cremosa, aproximadamente 7-8 cucharadas. Con la ayuda de una cuchara vamos administrando de la masa encima de cada canelon y enrollamos. En la base de la bandeja de horno suelo poner también un poco de la bechamel y si os gusta un poco de mantequilla. Colocamos los canelones y cubrimos con la bechamel restante. Espolvoreamos queso y gratinamos al horno hasta conseguir un color dorado muy apetecible. Como habréis visto ya en mi foto aparece una ración individual y cuando me di cuenta ya no me quedaba queso para gratinar (suelo poner el 4 quesos) así que el dorado del que hablo no esta pero no fue un gran impedimento para comernos los la verdad.