INGREDIENTES (18 canelones)
Para el relleno:
1 kg carrilleras
600 ml de caldo de pollo
400 ml de vino tinto
200 ml de Pedro Ximénez
1 cebolla
1 tomate
3 dientes de ajo
1 zanahoria grande
2 hojas de laurel
1 cda de miel
Para la bechamel:
800 ml de leche
40 grs de mantequilla
40 grs de harina
100 grs de parmesano rallado
PREPARACIÓN
En una sartén con un buen chorro de aceite doramos las carrilleras a fuego fuerte por ambos lados. Las reservamos.
Partimos la cebolla, el tomate, la zanahoria en trozos grandes y pelamos los ajos. Lo sofreímos todo en ese mismo aceite.
En una olla rápida o exprés ponemos las carrilleras, el sofrito de verduras, el vino tinto, el Pedro Ximénez, el laurel y el caldo de pollo. La cerramos bien y dejamos que se cocinen a fuego medio durante 40 minutos desde que haya subido la válvula.
Cuando se haya enfriado, abrimos la olla y retiramos las carrileras. Las reservamos.
Con una batidora trituramos el caldo con las verduras que llevaba. Ponemos la salsa en una sartén junto con la cucharada de miel a fuego medio durante 1 hora para que reduzca y espese.
Con ayuda de un tenedor o con las manos limpias deshilachamos las carrileras y las incorporamos a la salsa. Mezclamos bien y ya tendremos listo nuestro relleno.
Ponemos las placas de lasaña en remojo (en agua caliente, no hirviendo) durante 12 minutos o según indicación del paquete.
Mientras se hidratan las placas preparamos la bechamel. Ponemos un cazo a fuego medio con la mantequilla y le incorporamos la harina. La sofreímos un par de minutos para que luego no sepa a harina cruda. Vamos añadiendo poco a poco la leche caliento, removiendo enérgicamente con unas varillas de mano para que no queden grumos. Sazonamos con pimienta, y nuez moscada al gusto. Apagamos el fuego e incorporamos el parmesano. Removemos bien.
Disponemos las láminas de lasaña en una fuente de horno. Ponemos una cucharada del relleno en el extremo y la enrollamos. Hacemos lo mismo con el resto de canelones. Vamos disponiendo los canelones en una bandeja de horno conforme los vamos haciendo.
Cubrimos con la bechamel, añadimos por encima más queso rallado y lo gratinamos hasta que esté dorado.