Con este nombre se conoce al potaje elaborado con garbanzos, chícharos (judías) y arroz, con sus correspondientes verduras y la pringá, compuesta de chorizo, morcilla y tocino entreverado. Un plato lleno de sabor y que nos ayudará a entrar en calor y que va apeteciendo con la llegada del fresquito.
Como ocurre con el cocido andaluz, la pringá os servirá de segundo plato, con lo cuál, este potaje como suele ocurrir con casi todos, resulta un menú de lo más económico a la par de nutritivo.
Solo un apunte más, está mucho más sabroso de un día para otro.
200 gr de garbanzos
200 gr de chícharos (judías)
100 gr de arroz
1 tomate
1/2 pimiento rojo
1 /2 pimiento verde
2 cebollas
1 zanahoria
2 patatas medianas
1 diente de ajo
4 lonchas de beicon
1 chorizo tipo jabuguito
1 morcilla curada
1 trozo de tocino curado
Caldo de carne
1 hoja de laurel
Aceite de oliva
Pimentón dulce
Sal
En olla expréss
El día de vísperas, poner en remojo las legumbres.
Poner un chorrito de aceite de oliva en la olla y llevar al fuego. Trocear las cebollas y dorarlas un poquito junto al diente de ajo. Agregar la zanahoria cortada en rodajas, rehogando un poco y luego incorporar los pimientos troceados. Una vez esté todo bien rehogado, apartar del fuego y pasar por el chino o la batidora. Esté puré será la base de nuestro potaje.
En la misma sartén añadir el beicon troceado y dejar que se dore. Poner 2 cucharadas de pimentón dulce y freírlo un pelín. Agregamos ahora las legumbres y salteamos para que cojan color.
Vertemos sobre las legumbres el puré de verduras y añadimos caldo de carne o agua hasta la mitad de la olla. Ponemos las patatas troceadas, el chorizo, la morcilla, el tocino y la hoja de laurel. Cerramos la olla y cuando comience a silbar, contamos 20 minutos. Dejamos salir el vapor, destapamos, comprobamos de caldo y sal y añadimos el arroz. Volvemos a cerrar la olla y ahora esperamos solo 10 minutos más. Nuestro cascote estará listo para disfrutarlo.