El champiñón es un alimento que está cada vez más utilizado en numerosos platos de cocina, bien como guarnición, acompañando a platos de carne o de pescado, en forma de cremas o purés y asado, frito o salteado con otras verduras o incluso con jamón.
Además de las maravillas culinarias que nos ofrecen, los champiñones nos aportan unas cualidades dietéticas muy importantes.
No solo los tomo porque me gustan, también porque son muy diuréticos y van de categoría cada vez que me pongo a dieta (que son casi todos los lunes), ya que son un alimento hipocalórico y por lo tanto, están aconsejados en dietas de adelgazamiento.
El champiñón es un hongo que se cultiva en cuevas, sótanos o locales cerrados con un ambiente de temperatura y humedad apropiados para su cultivo y crecimiento.
Es un hongo de bonito aspecto, de color blanco nacarado y que tiene dos partes bien diferenciadas: la caperuza, que es la parte superior de forma redondeada y globosa; y el pie, que es el tronco de forma cilíndrica.
Cuando compres los champiñones tienes que fijarte de que estén enteros, frescos y sanos.
Esta receta con champiñones es mi aportación al reto de este mes de Color y Sabor de temporada, el reto en el que Pilar de Postres Originales, nos da a elegir entre dos verduras de temporada.
En esta ocasión, Elvira de Así se come en Granada ha escogido uno de los ingredientes, y nos ha propuesto la berenjena, el otro ingrediente, el champiñón, ha salido de una votación entre todos los que participamos. Me encantan los dos elegidos de este mes, pero me he quedado con los champiñones.
Ingredientes:(3 personas)
8 o 9 champiñones grandes.
125g de queso azul.
Un puñado de avellanas o nueces.
3 o 4 lonchas de salmón ahumado.
Aceite de oliva virgen.
Sal.
Modo de hacerlo:
Limpia los champiñones y separa el tallo de las cabezas, reserva.
Pica un poco las avellanas, reserva.
Trocea los tallos de champiñón y sofríelos en una sartén con un chorrito de aceite, cuando hayan reducido de tamaño y haya desaparecido el agua que sueltan, añade las avellanas picadas, sazona y dales unas vueltas para que se mezcle todo durante un par de minutos, apaga el fuego y reserva.
Precalienta el horno a 200º.
Unta una fuente o bandeja de horno con aceite y coloca encima las cabezas de los champiñones con la parte hueca hacia arriba.
Rellena cada cabeza con un trocito de queso azul.
Añade una cucharada de la mezcla de avellanas y champiñón.
Corta en tiras el salmón ahumado y pon dos tiras cruzadas por encima del relleno.
Hornea durante unos 20 minutos o hasta que veas que el champiñón está blando y el salmón ligeramente dorado.
Puedes servirlos como plato o como guarnición!!
A mi me encantan.....y a ti?
Espero que te guste.
Puedes ver las recetas de mis compañeros de reto pinchando en la foto del logo.