Lo que más me gusta del otoño son sus colores, me dan paz y tranquilidad, los colores del amanecer sobre el mar, los colores de las hojas de los árboles, de los bosques....Me gusta ese aire que sopla diferente al del verano y que suele ser más fresquito (sobre todo este año después del calor que hemos pasado)....y me encanta porque es temporada de setas, de rovellones....
Pero vamos con la receta de hoy, que me pierdo con el otoño. La primera receta de esta estación, es la tradicional coca de tomate que hacemos por Castellón y por toda la Comunidad Valenciana, y que puedes ver en Coca de tomate de Castellón, destapada, pero que esta vez he hecho en la freidora de aire.
A mi me va genial porque hago muchas recetas en las rejillas, y al tener un cristal en la puerta, veo como se va haciendo.
Para hacer la coca de tomate he utilizado la bandeja, y como son más pequeñas que las del horno, con la misma cantidad de masa que hago siempre, he hecho dos coquitas.
Y me ha ido de categoría porque así he hecho una con todos los ingredientes que suele llevar, y la otra la he hecho sin cebolla ni piñones, ya que a mi hijo no le gustan ninguno de los dos.
Y como puedes ver, han quedado de maravilla y en menos tiempo, con lo que ahorras luz, y sobre todo porque quedan crujientes por fuera y jugosas por dentro.
La cerveza hace que la masa suba y no necesite reposo para levar, se pone en el horno nada más está amasada, y queda muy crujiente.
Ingredientes:
Para la masa:
250gr. de harina (o la que te admita)
1/2 vaso de aceite de oliva, unos 100ml.
1/2 vaso de cerveza.
Para el relleno:
1 cebolla pequeña.
1 pimiento verde.
Pimiento morrón.
Tomate frito, o natural.
Sal.
Piñones.
1 lata de atún en aceite de oliva.
Modo de hacerlo:
La masa:
En un bol grande pon el aceite, la cerveza y una pizca de sal.
Añade poco a poco la harina y ves mezclando, cuando esté todo unido, pon la masa en la encimera y amasa con las manos hasta que se te despegue.
Aunque te parezca que puedes añadir más harina, no pongas más que te puede quedar seca y dura.
El relleno:
En una sartén con aceite de oliva, rehoga la cebolla picada y el pimiento verde troceado, durante unos 15 o 20 minutos a fuego suave.
Añade el tomate frito y el pimiento morrón cortado en trocitos, mezcla bien y deja cocer todo junto unos 5 minutos, deja que se enfríe y reserva.
La coca:
Programa la freidora a 180º durante 20 minutos, yo pongo el programa pizza.
Deja que se precaliente durante 5 minutos.
Divide la masa en dos partes iguales.
Pinta la bandeja de la freidora con un poquito de aceite.
Extiende la masa sobre la bandeja y remata dando forma a la coca.
Reparte el relleno de las verduras sobre la masa, añade por encima el atún y los piñones.
Coloca la bandeja en la freidora de aire a baja altura, y deja que se cueza durante los otros 15 minutos, o añade más tiempo si ves que aún no está tostada.
Pasado el tiempo, saca la bandeja de la freidora, deja que se enfríe un poco y ponla sobre una rejilla.
Haz lo mismo con el otro trozo de masa.
También puedes hacer cada coca de una manera.
Y si tu freidora no es como la mía, también puedes hacerla igual, pero en tu caso seguramente te saldrá redonda.
Espero que te guste.
Fuente: este post proviene de Mandarinas y Miel, donde puedes consultar el contenido original.
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