Los helados son uno de los postres típicos de verano que nos ayudan a combatir el calor y que además están buenísimos. ¿Nos podríais decir cuántos podéis consumir en esta época del año? Seguro que unos cuantos. Si los hacemos en casa, además de controlar los azúcares y obtener un postre libre de aditivos, nos aseguramos elaborar un dulce 100% artesanal con un sabor especial creado por nosotros mismos. ¡No hay dos helados iguales!
Si vosotros también sentís debilidad por los helados, seguid leyendo porque en el artículo de hoy os contamos, paso a paso, cómo hacer un helado de chocolate fácil y sin máquina. Por si no lo sabíais, no hace falta disponer de heladera para hacer en casa uno de los postres estrella del verano ¿Para qué comprarlos si los podemos hacer nosotros mismos?
¿Cómo hacer helados caseros?
Aunque pueda parecer lo contrario, la elaboración de helados caseros es bastante más sencilla de lo que os podéis imaginar. Desde la primera vez que nosotros los hicimos en casa, siempre hemos obtenido un excelente resultado. Su sabor es tan natural e intenso que hace que preparar helados artesanales merezca la pena.
Como decíamos antes, elaborar este tipo de dulces en casa nos permite conocer de primera mano su composición y evitar ciertos ingredientes que son perfectamente prescindibles en su elaboración. Este es el caso de los aditivos, colorantes y otro tipo de azúcares añadidos cuya procedencia no controlamos.
En esta receta nosotros hemos optado por hacer un helado de chocolate. No obstante, lo bueno de preparar helados caseros es que puedes elegir la combinación exacta de ingredientes que quieres que contenga el tuyo. Otros sabores de helados que podemos preparar nosotros mismos son: fresa, limón, yogur, galleta, vainilla, etc. La preparación de estos sabores es idéntica a la que detallaremos a continuación, simplemente hay que sustituir el chocolate por el ingrediente que queramos utilizar.
Ingredientes para hacer el helado:
300 ml de leche entera
200 gramos de chocolate especial coberturas (el de repostería)
35 gramos de cacao en polvo (sin azúcar)
120 gramos de azúcar glas o pulverizado
500 ml de nata (crema de leche) para montar (con un 35% de materia grasa)
3 huevos
1 cucharada de extracto de vainilla
30 gramos de miel
1 pizca de sal
Pepitas de chocolate (o reservar una parte del chocolate para coberturas y picarlo en trocitos pequeños)
Receta de helado casero de chocolate
En primer lugar, antes de comenzar es necesario que contemos con un recipiente en el que verter nuestro helado. Ha de ser grande y apto para meterse en el congelador. Nosotros recomendamos que tenga una forma rectangular, ya que esto nos ayudará a retirar las bolas de helado con mayor facilidad.
Empezaremos calentando en un cazo o cazuela la leche junto a los 120 gramos de azúcar glas y moveremos constantemente para que el azúcar no se queme.
Justo en el momento en el que la leche comience a hervir le iremos añadiendo las onzas de chocolate para coberturas y moveremos hasta que se fundan completamente.
Una vez que tengamos el chocolate bien integrado con la leche, será el momento en el que debamos incorporar los 35 gramos de cacao en polvo sin azúcar y lo mezclaremos también con ayuda de unas varillas hasta obtener una mezcla homogénea y sin grumos.
A continuación, retiraremos la mezcla del fuego y la trasladaremos a un bol para que pierda calor de una manera más rápida.
Cuando la mezcla esté a temperatura ambiente (no esté caliente cuando introduzcamos el dedo en ella) deberemos añadir el chorrito de miel y la pizca de sal. Seguro que os preguntaréis que por qué a un postre dulce hay que añadirle sal. Muy sencillo, la sal nos ayudará a que cuando metamos el helado en el congelador, éste no cristalice rápido y obtengamos como resultado una textura cremosa.
El siguiente paso es ir añadiendo uno a uno los huevos a la mezcla de chocolate e iremos batiendo con las varillas para que quede todo bien integrado. Es muy importante que el chocolate no esté caliente a la hora de añadir los huevos, pues estos podrían cuajarse con el calor y esto destrozaría nuestro helado. La mezcla obtenida la reservaremos.
En otro bol echaremos la nata (crema de leche) líquida, muy importante que sea 35% materia grasa, ya que si no la nata (crema de leche) no montará. Nuestro consejo para que la nata (crema de leche) monte mejor es meterla en el frigorífico para que esté fría antes de comenzar a batirla.
Cuando la nata (crema de leche) esté bien montada, iremos añadiendo poco a poco (para que la nata (crema de leche) no se baje) la mezcla de chocolate iremos moviéndolo, con ayuda de una pala, a través de movimientos ascendentes de abajo a arriba.
Por último, verteremos la mezcla resultante en el recipiente que reservamos al inicio y lo taparemos con papel film. Lo introduciremos en el congelador e iremos moviendo la mezcla cada 30 minutos (3 veces) para que evitar que se cristalice.
Para tener un helado casero perfecto, debemos dejar que la mezcla permanezca en el congelador durante al menos 6 horas. Nosotros lo que hacemos es preparar el helado de un día para otro, es decir, que lo consumimos al día siguiente.
Si queréis que tenga pepitas de chocolate, al finalizar pondremos los trocitos de chocolate (podemos cortar trozos pequeños de una tableta) por encima del recipiente. Así, al coger con la cuchara heladera las bolas de helado, los trocitos de chocolate se integrarán con el helado.
¿Cómo hacer helados cremosos?
Los trucos para conseguir un helado bien cremoso son los siguientes:
Batir la nata (crema de leche) hasta que monte y evitar que al añadir el chocolate esta mezcla baje en altura.
Añadir miel a la mezcla. La miel es anticongelante y evita que el helado llegue a cristalizarse. Si no tuvieras miel, puedes sustituirlo por azúcar invertido.
No te olvides de la pizca de sal. Al igual que en el punto anterior, la pizca de sal ayudará también a que el helado no se cristalice.
Batir de manera constante. Durante todo el proceso tenemos que batir la mezcla de manera constante para que el aire pueda penetrar en la mezcla.
Una vez metamos la mezcla en el congelador, tenemos que removerla cada 30 minutos en 3 veces distintas. Luego dejaremos reposar.
¿Cómo hacer un helado casero sin máquina?
Como habéis comprobado, hacer un helado casero sin heladera es facilísimo. En ocasiones anteriores nos habíamos resistido a realizar esta receta debido a la falsa creencia de que necesitaríamos esta máquina para que nos quedara un helado decente. Nada más lejos de la realidad, simplemente con nuestras manos y estando pendiente de que nuestro helado cada 30 minutos de que nuestra mezcla no se cristalice, obtendremos un helado de 10.
Máquina de hacer helados o heladera
No obstante, si tenemos la suerte de contar con una heladera, podéis seguir nuestra receta exactamente igual hasta el paso 8 y cuando tengamos la mezcla solo tendremos que mantecarla en la máquina durante aproximadamente 30-45 minutos.
Tened en cuenta que antes de verter nuestra mezcla en la heladera, ésta debe estar bien fría. Para ello, podéis dejarla la noche anterior en el congelador.
Si estáis buscando una buena máquina para hacer helados caseros, os recomendamos echar un vistazo a las siguientes heladeras y otros complementos necesarios cuando elaboremos helados en casa:
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¿A qué estáis esperando para poner en práctica nuestra receta? No dejéis pasar más el tiempo, que el verano a pasando y si podemos hacerlo junto a un rico helado elaborado por nosotros mismos, mejor
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