La mayoría de las recetas de almejas suelen ser fáciles de hacer y, a pesar que pasan por un proceso de depuración para que el marisco llegue en perfecto estado al consumidor final, es posible que estos productos todavía guarden algo de arena de en su interior.
Cuando compramos almejas, siempre es recomendable pasarlas por agua al llegar a casa.
En Mariscos Camino velamos para que cada producto salga de nuestras instalaciones cumpliendo los mas altos estándares de calidad y, aún así, recomendamos lavarlas a para quitar la arena que pudiera quedar.
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¿Que debo hacer para quitar la arena a las almejas?
El procedimiento es sencillo:Llenamos un recipiente amplio con abundante agua fría.
Le agregamos dos cucharada de sal gorda.
Removemos el agua hasta que se disuelva la sal.
Introducimos las almejas, asegurando que quedan bien sumergidas.
Mete el recipiente en la nevera para quitar la arena a las almejas.
Repite este procedimiento dos o tres veces en un lapso de 2 horas. (Nuestras almejas suelen traer muy poca arena, por lo que en ocasiones con un cambio de agua puede ser suficiente).
Durante el remojo, las almejas expulsarán las impurezas y restos de arena que puedan contener. Cuando las retires del recipiente, cógelas con la mano para evitar que vuelvan a absorber la arena.