Conejo relleno de guisantes con jamón

Hoy un plato doblemente ligero, primero porque la carne de conejo es una de las que menos grasas presenta, junto a un elevado valor nutritivo, y segundo por la técnica de cocción al vapor, que no aporta calorías adicionales. Lo difícil es deshuesar el conejo, pero eso se lo dejo a la especialista del mercado que lo borda. Y para rellenar la pieza hemos elegido un sencillo rehogado de guisantes, que le dará sabor y color manteniendo el espíritu ligero del plato.



Ingredientes

Para dos personas

1/2 conejo deshuesado (cuartos traseros)

250 gr de guisantes

2 c/c de sofrito

50 gr de jamón

20 ml de anís

unas hojas de menta fresca

sal, pimienta

aceite de oliva extra virgen

Preparación

Preparar los ingredientes, picar fino el jamón y la menta y reservar.

En una cazuela al fuego, con abundante agua dar un hervor a los guisantes. Retirar y escurrirlos bien.



En una sartén al fuego poner a calentar un par de cucharadas de aceite de oliva y añadir el sofrito, dar un par de vueltas y echar los guisantes, remover para que se mezclen los ingredientes. Añadir el anís y dejar evaporar el alcohol. Echar el jamón cortado en trocitos pequeños y la menta. Salpimentar, ojo que el jamón ya aporta sal! Rehogar los guisantes unos cinco minutos más y retirar del fuego.



Estirar la carne y colocar en el centro una porción de la verdura cocinada. Enrollarla, con las puntas hacia adentro, de manera que no se salga el relleno. Hacer rodar la pieza sobre papel film y cerrarla con el plástico, apretando por los extremos para que quede compacto.



Cocer al vapor durante aproximadamente veinte minutos. Al colocar la pieza en la vaporera, pinchar el plástico por tres o cuatro sitios para que drene el jugo de la cocción. En este caso hemos utilizado una vaporera de bambú sobre una cazuela al fuego con un poco de agua, pero puede utilizarse cualquier otro elemento que realice esta función.

Retirar el plástico y en una sartén al fuego con unas gotas de aceite tostar ligeramente el exterior. 

Cortar en rodajas gruesas y emplatar. Acompañar de más guisantes o de otras verduras al gusto.