Ingredientes:
200 grs. de mascarpone
4 cucharadas de cebolla caramelizada
100 grs de nueces de california.
1 paquete de obleas para empanadillas
1 huevo.
Preparamos en un bol, el queso mascarpone y la cebolla caramelizada, lo batimos bien para que se mezcle.
Con las nueces, yo las he picado a mano en trocitos pequeños, para que luego podamos encontrar el crujiente. Las mezclamos con el mascarpone y la cebolla y procuramos que todo quede bien integrado.
Preparamos las obleas y vamos depositando una cucharada no demasiado llena, las doblamos, las apretamos un poco el borde y con un tenedor las hacemos unas señales que ayudan a que se cierren.
En este caso, yo las he colocado al horno, en casa fritas no nos gustan demasiado, pero también se prodrían freir.
Antes de colocarlas en el horno, las he pincelado con huevo, para que quede una apariencia más brillante y dorada.
Tras sacarlas del horno, las dejamos enfriar, un poco tibias o frías están aún más buenas.