El tiempo veraniego se acerca y salimos de excursión a la playa, piscina, campo, ... en definitiva, comemos fuera de casa y solemos llevar comida que se pueda comer fría o a temperatura ambiente.
Una buena opción son las croquetas que os traigo hoy, de champiñones y taquitos de jamón.
Bueno y ya puestos, para el aperitivo, una merienda o cena informal, ... podemos sorprender con un plato tan clásico como las croquetas, pero original por los ingredientes.
Limpiar con cuidado los champiñones, cortar en trocitos pequeños y reservar.
Cortar en trocitos pequeños las lonchas de jamón serrano (que tengan un poco de grosor)
Poner en una sartén un poco de aceite. Mientras se calienta, trocear la cebolla en trocitos pequeños. Cuando empiece a estar transparente, añadir los champiñones reservados y saltear. Una vez evaporada el agua que sueltan, condimentar con la picada de ajo y perejil y remover. Añadir los trocitos de jamón serrano y dar unas vueltas para que se integren todos los sabores. Incorporar un par de cucharadas de harina, remover e ir volcando leche sin dejar de remover hasta obtener una masa que se separe de las paredes de la sartén.
Dejar enfriar en un recipiente un par de horas (o de un día para otro). Coger porciones y dar forma de croqueta. pasar por el huevo batido y después por el pan rallado. Freir por tandas y dejar que escurran el exceso de aceite en papel de cocina.
Listas para comer. Bon profit ¡¡¡¡
Fuente: este post proviene de tothom a la cuina, donde puedes consultar el contenido original.
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