Este verano he estado un pelín desaparecido, pero es que entre exámenes, trabajo y que no he tenido mucho tiempo libre... pues no he podido estar al pie del cañón. Pero vengo ya con buenas ideas y algunos cambios y aportaciones que seguro que os encantan. Esta semana mismo pienso anunciar un cambio en el blog que seguro que os gusta... ¡Estad atentos que pronto lo descubriréis!
Estos deliciosos polos han sido sin duda una de las mejores recetas que he hecho este verano. Ya son tres las veces que los he hecho en casa porque están buenísimos... así se explica que haya aumentado un pelín de peso estos últimos meses... ¡Pero es que están...! ¡Tenéis que probarlos! Solo con verlos a través de la pantalla no podéis imaginarlo...
Ahora ya la operación bikini da igual, ¡podéis saltarla sin problemas ni comedoras de cabeza! Animaos a hacerlos en casa con vuestros hijos. Ya os digo más abajo que si no tenéis moldes como los míos, podéis usar las cápsulas de los yogures o vasos de cristal... ¡Hay que buscar soluciones a todo! Ante todo: ¡hacedlos!
Polos de chocolate
Dificultad: Fácil
Raciones: 8 polos
Etiqueta: Aperitivo Dulce, Helado
Receta: Food&Cook
380 ml de leche
180 ml de nata (crema de leche) líquida
50 gr de cacao en polvo
Una cucharadita de vainilla en pasta
Una pizca de sal
Dos cucharadas y media de maizena
100 ml de leche evaporada
130 gr de azúcar
- En un vazo, mezclamos un poco de leche con las dos cucharadas y media de maizena hasta que esté bien disuelto. Reservamos.
- En un cazo, mezclamos bien todos los ingredientes, incluyendo la mezcla de leche y maizena y lo llevamos a fuego medio, revolviendo si parar, constantemente, para que la mezcla no se queme. Tiene que espesar ligeramente.
- Distribuímos en los moldes de helados. Si no tenéis molde como el mío, podéis usar vasos pequeños o incluso vasos de yogur.
- Colocamos los palos y llevamos al congelador durante al menos cinco horas.
- Cuando vayamos a consumir, para sacar los polos de los moldes, recomiendo que paséis los moldes o los vasos por el grifo con agua templada- caliente durante unos segundos: saldrán sin problema.
- Servir en frío, obviamente.
¡A disfrutar!