Volver a la normalidad cuesta un montón y más cuando hace un tiempo fantástico y apetece estar en el jardín (siempre y cuando te lo permite la alergia), en cuanto suba este post nos pondremos de nuevo en marcha y espero no volver a fallar más.
A pesar de hacer ya algo de calor a mi marido se le antojó la semana pasada que hiciese cocido y al final andaban rondando por la nevera los garbanzos y el caldo, así que ayer a la hora de pensar que hacer de comer me acordé de ellos y pensé en usarlos para este empedrao, tenía también algunas alcachofas y unos ajos tiernos de los que compré en Cartagena, es un plato bien sencillo y que al llevar el caldo del cocido queda muy sabroso, con este plato damos una vuelta de tuerca al aprovechamiento de restos.
Para hacerlo vamos a necesitar:
Caldo de cocido
Garbanzos sobrantes del cocido aprox 300 gramos
2 pimientos verdes
4 alcachofas
1 manojo de ajos tiernos
250 gramos de carne de cerdo
200 gramos de arroz
3 tomates
Aceite de oliva virgen extra
Azafrán de hebra
Sal
Una cucharadita de pimentón
Colorante amarillo opcional
Lo primero que tenemos que hacer es limpiar los ajos tiernos y las alcachofas, una vez que los tengamos limpios troceamos los ajos no excesivamente pequeños, de unos 2 cm de longitud, los reservamos. Las alcachofas las partimos en dos si son pequeñas y en cuatro si son grandes.
Troceamos también los pimientos, hacemos lo mismo con la carne y la salamos.
Rallamos los tomates.
En una sartén con un poco de aceite doramos primero los ajos, tener cuidado con la potencia del fuego porque son bastante delicados y se queman con facilidad, los sacamos una vez listos y los reservamos. Doramos bien las alcachofas y hacemos lo mismo con los pimientos, reservamos todo.
En la misma sartén podremos la carne a dorar, dejamos que se haga bien por todos los lados y una vez que esté lista incorporamos el tomate rallado, bajamos el fuego y dejamos que el tomate se vaya haciendo a fuego más bien lento, añadimos el pimentón y damos unas vueltas más
Cuando el tomate esté listo incorporamos el arroz y el azafrán que habremos convertido en polvo con el mortero.
Ponemos a hervir el caldo del cocido.
Pasamos a la paellera el arroz, los ajos, las alcachofas y los pimientos, incorporamos también los garbanzos y el colorante si es que lo usamos, cubrimos con el caldo del cocido hirviendo (el doble de caldo que de arroz aprox) y dejamos cocer unos 20 minutos, los 5 primeros minutos a fuego fuerte y el resto a fuego medio.
En caso necesario añadimos un poco de caldo, pero siempre caliente, rectificamos de sal y una vez que el arroz esté listo lo dejamos reposar unos minutos antes de servir.
Espero que esta receta os sirva para dar una nueva vida a esos garbanzos del cocido que nadie se come.