Como ya comenté, estoy probando recetas sin gluten, porque últimamente parece que me hace pesadas las digestiones y de paso pruebo productos nuevos y experimento con ellos.
Hoy es el turno de la pasta sin gluten. Está hecha de harina de maíz y de arroz. Queda una textura diferente a la pasta de trigo, como más harinosa y para mi gusto necesita de una salsa -en este caso mahonesa-, para que esté más jugosa.
Aún así esta de Gallo no está mal, aunque probaré otras marcas para comparar. Viene con trucos para que quede lo más al dente posible, como que no hay que refrescarla bajo el grifo de agua fría.
Queda bastante más ligera, al menos a mi, me resultó más digestiva.
-medio paquete de hélices sin gluten
-un tomate picado
-un pepino pelado y picado
-una cebolleta picada
-2 latas de atún escurrido
-queso fresco picado
-sal
-pizca de hierbabuena
-mahonesa
Cocemos la pasta siguiendo las indicaciones del fabricante. Escurrimos sin refrescar y mezclamos con el resto de ingredientes.
Dejamos enfriar y metemos en la nevera hasta el día siguiente.
Añadimos mahonesa cuando vayamos a comer.