Evidentemente la ensaladilla rusa no es un plato malagueño pero sí que es una de las tapas por excelencia en Málaga. No hay bar ni restaurante que se precie que no te ponga una tapita de ensaladilla rusa acompañando a una cervecita bien fría.
De hecho, organizado por la revista Excelente, recientemente se celebró en Málaga un concurso entre prestigiosos restaurantes para elegir la mejor ensaladilla rusa del 2014 resultando ganadores los restaurantes Pórtico de Velázquez y Frutos (archiconocido por su excelente ensaladilla rusa).
Todos sabemos que hay muchos tipos de ensaladillas rusas dependiendo de los ingredientes que le pongamos. Cada cocinero tiene una forma de hacerla y casi podría asegurar que en cada casa se hace de una manera diferente. Yo os voy a enseñar cómo la hago y como siempre suelo decir, la base para el éxito es una buena materia prima y mucho cariño en la cocina.
Ingredientes:
1 Kg de patatas
3 latas de atún en aceite de oliva
1 paquete de tronquitos de mar o palitos de cangrejo
media cebolleta
un puñadito de variantes en vinagre al gusto (pepinillos, cebollitas, zanahoria, coliflor?)
1 paquete de aceitunas sin hueso
Mayonesa (a poder ser hecha en casa con huevo y aceite de girasol ya que el de oliva es demasiado fuerte)
1 latita de pimiento morrón
Sal
Comenzamos lavando y cociendo las patatas.
Comprobamos que están bien cocidas pinchándolas con un cuchillo y las escurrimos. Tras esperar un buen rato a que se enfríen las pelamos y trituramos con un tenedor en un recipiente amplio. Es importante que quede en partes desiguales para la textura de nuestra ensaladilla.
Le ponemos un poco de sal a las patatas y le agregamos el atún incluyendo un poco del aceite de las latas para que se empapen bien las patatas y cojan todo el sabor. Mezclamos bien.
Añadimos la cebolleta muy finamente cortada, las variantes picadas y las aceitunas cortadas en láminas.
Removemos bien el conjunto y agregamos los palitos de cangrejo cortados.
Hacemos una mayonesa con dos huevos, un pellizco de sal, el zumo de medio limón y aceite de girasol.
La vertemos en nuestra ensaladilla y mezclamos bien con una cuchara amplia. Probamos y rectificamos de sal en caso necesario.
Guardamos la ensaladilla en el frigorífico para que se ponga bien fría antes de consumirla.
Cuando la vayamos a presentar, le ponemos unas tiras de pimiento morrón por encima.
Os dejo otra versión de presentación: unos canapés de ensaladilla rusa.
Espero que os guste!!!