Además también están muy buenos para el día siguiente y se llevan fácilmente en un túper. Eso sí, para el día siguiente mejor guárdalos en la nevera (por la nata (crema de leche) sobre todo).
Ingredientes
500 gr de espaguetis
1 brick de 200 ml de nata (crema de leche) líquida de bajo porcentaje de materia grasa (también pueden ser 2 si os gusta con más salsa)
350 gr de bacon
Media cebolla mediana
Una nuez de mantequilla
Elaboración
Si una imagen vale más que mil palabras, imaginad un vídeo. Así que espero que lo disfrutéis tanto como yo he disfrutado haciéndolo.
Cortamos muy fino la cebolla y el bacon en tiritas. Los ponemos en una sartén grande a freírse.
Mientras se van dorando, ponemos abundante agua en una olla a la que salaremos y le añadiremos la nuez de mantequilla. Echaremos los espaguetis y los hervimos según nos indique el paquete.
Cuando está dorado el bacon con la cebolla echamos la nata (crema de leche). Podéis echar la cantidad que queráis, al gusto. Yo reconozco que un paquetillo de 200 ml para medio kilo de espaguetis es un poco justo, la verdad. Por eso digo que podéis echar hasta 2 bricks. Dejaremos que reduzca y estará lista cuando a la nata (crema de leche) le cueste volver después de hacer una raya por el medio. Ved el vídeo que lo aclara mucho mejor de lo que lo explico. En este momento podéis añadir a la salsa algo de pimienta y/o nuez moscada, pero como en casa no gusta mucho pues yo no se la hecho.
Con la salsa hecha añadimos los espaguetis para que se impregnen bien con la salsa y listos. En la foto le hemos puesto un poco de queso rallado y orégano por encima.
Un plato delicioso que se come ¡con tenedor y cuchara!