Hola a tod@s!! Hemos vuelto con una comida que no es que sea de estas fechas, estamos en Semana Santa, aunque con el confinamiento no lo parezca, pero cuando apetece una buena fabada, apetece.
Hacer una fabada es fácil, pero necesitas tiempo, porque ella no quiere prisas, solo fuego lento e ir haciendo chup chup a su aire. Es un plato único y bastante contundente, aunque un día es un día no?
Otra cosa que tenéis que tener en cuenta son los ingredientes para hacerla, deben ser de calidad. Ya sé que son caros por aquí, pero debéis buscar una buena fabe de Asturias, con denominación de origen, y un buen compango, que también debe ser de Asturias, porque no te vale cualquiera, el chorizo y la morcilla deben ser ahumados para que le dé el sabor característico. Merece la pena gastarse algo más de dinero y notarás la diferencia.
INGREDIENTES:
- 1/2 kilo de fabes asturianas
- Un paquete de compango (con chorizo, morcilla, tocino y lacón)
- 200 g más de lacón curado
ELABORACIÓN:
Como he dicho antes es un plato muy sencillo, pero necesita tiempo. Lo primero que vamos a hacer es dejar toda la noche las fabes en remojo, unas 12 horas, Desecharemos las que estén rotas o en mal estado.
Por la mañana, desechamos el agua del remojo, las enjuagamos bien y las ponemos en una olla. Echamos agua hasta cubrirlas, unos dos dedos por encima y ponemos la fuego, ahora podemos ponerlo fuerte.
Cuando empiece a hervir, espumamos, es decir, quitamos la espuma que va saliendo y bajamos el fuego. Hay personas que le quitan este agua por completo y le ponen un agua nueva (dicen que es para reducir las flatulencias que pueden producir las fabes) yo no lo hice.
Ahora le echas el lacón y el tocino (también puedes echarle un hueso de jamón si tienes) y dejamos que vaya hirviendo a fuego lento. Es muy importante no remover la olla con cazos ni cucharas, se partirían las fabes, es mejor ir removiendo la cazuela u olla entera con movimientos circulares o de vaivén.
A la hora o 1/2 hora echamos un vaso de agua, esto se llama "asustar" a las fabes y se supone que así salen más tiernas. Echamos la morcilla y el chorizo (en mi caso eran dos chorizos). Si no quieres mucha grasa, puedes hervir aparte el chorizo y la morcillas, pero a mi me encanta el sabor que le deja. Lo que yo hago es antes de emplatar, quitarle un poco de la grasa que se acumula por encima.
Pasadas otra 1/2 hora volvemos a "asustar" con otro vaso de agua y ya la dejamos hirviendo a fuego suave hasta que estén tiernas. Las mías han estado dos horas.
Tenéis que ir probando de sal, yo no he necesitado echarle nada porque un trozo de lacón estaba más salado y he tenido suficiente, depende mucho de la carne que le echéis.
Dejamos reposar mínimo una hora o dos (también podéis hacerla de un día para otro, los sabores se acentúan) y servimos con las fabes y el compango cortado en trocitos.
Un placer de dioses!!!
ESPERO QUE OS HAYA GUSTADO!!! UN BESO!!
Fuente: este post proviene de Tartis y Más, donde puedes consultar el contenido original.
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