Receta de focaccia casera italiana
Plato: Pizzas y masas
Raciones: 4 raciones
Tiempo de preparación: 30 minutos
Calorías: 300 kcal
Tiempo total: 1 hora y 10 minutos
La focaccia es un plan plano italiano que se caracteriza por su miga esponjosa y su corteza crujiente. Decorada con tomates cherry, cebolla, aceitunas negras, sal gruesa, orégano y una capa generosa de aceite de oliva, esta focaccia casera va a ser tu favorita en cuanto la pruebes.
Ingredientes
Para la masa
500 gr de harina de trigo
375 ml de agua
10 gr de sal
2 gr de levadura seca o 12 gr de levadura fresca
2 cucharadas de aceite de oliva
Para decorar
12 aceitunas negras con o sin hueso
6 tomates cherry
1/4 de cebolla morada
1 cucharadita de orégano
1 cucharadita de sal gruesa
6 cucharadas de aceite de oliva
Preparación de la focaccia casera
Escoge un recipiente amplio para poder preparar la masa y mezcla 375 mililitros de agua natural junto con 500 gramos de harina de trigo.
Añade 10 gramos de sal y 2 gramos de levadura seca. Si no tuvieras levadura seca puedes poner 12 gramos de levadura fresca de panadería.
Mezcla bien todos los ingredientes, puedes hacerlo con una cuchara o con las manos. Después amasa durante 5 minutos cogiendo la masa por un lateral y haciendo pliegues hacia adentro. Quedará una masa pegadiza, por eso es mejor amasar en el mismo recipiente.
Una vez hayas amasado durante 5 minutos, tapa el recipiente con papel film y deja reposar la masa durante 15 minutos, en un lugar cálido de la cocina como dentro del microondas o dentro del horno apagado.
Al cabo de 15 minutos destapa la masa y hazle de nuevo unos pliegues hacia adentro. No tienen que ser muchos ya que solo queremos activar la levadura. Deja reposar la masa 15 minutos más, tapada y en un lugar cálido. Pasados los 15 minutos hazle de nuevo unos pliegues, pon 2 cucharadas de aceite en un recipiente grande, tápalo con papel film y deja reposar en la nevera 24 horas.
Al cabo de 24 horas la masa tendrá este aspecto, bien hinchada, perfecta para que quede esponjosa una vez horneada.
Forra una bandeja con papel vegetal, añade 3 cucharadas de aceite sobre el papel y pon la masa encima. Si quieres una focaccia pequeña como la mía divide la masa en dos porciones iguales, sino te quedará demasiado gruesa. Mi bandeja mide 30×18.
Tapa la bandeja con un paño de cocina y deja reposar 2 horas más en un lugar cálido.
Mientras la masa reposa prepara los ingredientes para decorar la focaccia. Corta un cuarto de cebolla morada en juliana y 6 tomates cherry por la mitad. Prepara también 12 aceitunas negras y el orégano seco.
Pasadas las 2 horas la masa habrá crecido de nuevo. Añade las 3 cucharadas de aceite restantes por encima y hunde los dedos ligeramente mojados en aceite.
Decora la focaccia con los tomates cherry, la cebolla y las aceitunas negras. Espolvorea el orégano seco por encima y hornea a 200ºC unos 35-40 minutos, con el horno ya precalentado.
Una vez horneada la focaccia casera añade sal escamada por encima y a comer.
Decora la focaccia casera a tu gusto
Aunque la focaccia es originaria de Liguria, cada región de Italia tiene su propia versión, para que puedas escoger la que más te guste.La versión más simple de focaccia casera, típica de Génova, solo lleva aceite de oliva y sal gruesa por encima.
En Bari se le añaden tomates cherry y aceitunas, además de aceite de oliva.
La focaccia italiana realmente se puede decorar con los ingredientes que más te gusten. Yo le puse cebolla morada, aceitunas negras, tomates cherry, aceite de oliva y orégano. Pero también se le puede añadir queso rallado y otras especias aromáticas como romero, tomillo o incluso hierbas provenzales.
Para hacer una variación dulce de focaccia, cómo la que se hace en Venecia, solo tienes que incorporar azúcar y frutas confitadas por encima.
Platos italianos para acompañar
Si sirves la focaccia casera como aperitivo puedes preparar una rica lasaña italiana, que te servirá de plato único.Para reuniones con amigos una buena idea es preparar pizzas de varios sabores, como la pizza de gorgonzola y jamón o la pizza 4 estaciones.
Si prefieres algún guiso de carne puedes preparar osobuco de ternera con puré de espinacas o ragú de ternera con verduras.
Como postre una variación del clásico tiramisú, un tiramisú de cerezas cremoso y con un sabor delicioso.
¡Buen provecho, familia!