Y esto no sólo lo digo yo, también mi madre, que en cuanto probó una no dudó en encargarme una docena para sus compañeras del trabajo, quienes a su vez le pidieron la receta. ¿Queréis saber más? Pues mirad.
Ingredientes (fuente Danza de Fogones, receta modificada)
90gr de mantequilla sin sal a temperatura ambiente
80gr de azúcar moreno
100gr de harina de todo uso
80gr de copos de avena
1/2 cucharadita de sal
2 cucharadas de leche desnatada
Preparación
Trituramos los copos de avena y se mezclan con la harina y la sal.
Batimos la mantequilla con el azúcar hasta que se mezclen de forma homogénea.
Se añade la mezcla de harina, avena y sal al bol de la mantequila y se bate hasta que la masa tenga una consistencia desmigada.
Incorporamos la leche, se mezcla hasta deshacer los grumos y se enfría la masa en la nevera durante 30 minutos.
Precalentamos el horno a 180º
Estiramos la masa y cortamos con un cortapastas para ir pasándolas a la bandeja de horno previamente cubierta con papel antiadherente.
Horneamos a 180º durante 12-15 minutos, hasta que la base esté dorada.
Se dejan enfriar en una rejilla antes de desgustar.
Notas
Podéis usar harina integral y hacerlas aún más sanas. En mi caso opté por harina de todo uso por comodidad y no bajar al súper.
La dejé 30 minutos en la nevera, y no 15 como recomiendan en la receta original, porque se me pegaba y rompía al cortarla.
Yo las corté directamente con el cortador del set de sellos marcadores de galletas, que adquirí en Galletilandia y que podéis comprar haciendo click aquí.
A la hora de hornearlas fijaos siempre en la base, levantando un poco la galleta con una espátula, ya que pueden estar ligeramente doradas por arriba pero chamuscadas por abajo.
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