Este postre es ideal para aprobechar las fresas que están poco vistosas, ya sea porque se nos han madurado demasiado o bien porque en el fondo de las cajas nos suelen ponen las peores y hay que consumirlas deprisa para que se nos estropeen del todo.
Resulta muy fácil de hacer, es muy bueno y ligero e ideal para el verano.
Ingredientes:
1/2 kg de fresas maduras (pueden ser trozos)
1 terrina de queso fresco de untar bajo en grasa (queso batido, nata (crema de leche) líquida, etc..)
6 hojas de gelatina
1/2 vaso de leche
Edulcorante al gusto
Elaboración:
Poner a hidratar la gelatina en 1/2 vaso de agua, 2 o 3 minutos.
Mientras, se trituran las fresas con el queso de untar y la cantidad de endulzante que prefiráis, (yo le pongo 2 cucharadas soperas de edulcorante líquido) y reservar.
Cuando esté blanda la gelatina se escurre muy bien, se le añade el medio vaso de leche y se deshacen en el micro durante un minuto, se saca y se agita para deshacerla bien sin que queden grumos, si en necesario se mete en el micro unos segundos mas pero ojo no pasarse porque si hierve no cuajará.
Se vierten en la mezcla anterior sin dejar de batir, mejor usar la batidora y colocar la mezcla en un molde. Dejar que cuaje en la nevera y listo. Cuajará en unas 4 o 5 horas, pero podéis adelantar el proceso poniéndolo en el congelador un ratito y después en nevera. Lo ideal es hacerlo de un día para otro.
Nota: yo he utilizado queso tipo Philadelfia pero se puede hacer con queso batido, requesón, nata (crema de leche) líquida, o hasta incluso leche de soja para los que no quieren utilizar leche de vaca. En este caso tenéis que tener en cuenta de que al ser mas líquida que el queso se ha de poner más gelatina para que espese, unas 2 o 3 hojas mas.
Para los que no les guste encontrarse los gránulos de las fresas o quieran hacerla mas fina aún, solo tiene que colar la mezcla una vez bien triturada, antes de poner a cuajar.