En Navidad y en invierno no todo son recetas de bizcochos, turrones y postres... Podemos ir más allá y prepararnos un placer líquido como estos que os traigo yo hoy. Me he decantado por dos recetas europeas y una más estadounidense con las que espero que rellenéis muchas de estas tardes frías que están por venir.
Estas bebidas se caracterizan por su toque especiado (bueno, el chocolate no tanto), típico de muchas recetas de estas fechas. El Glühwein hacía mucho que no lo probaba y lo que sí que es verdad es que el casero es mucho mejor que el que podéis encontrar por ahí. Realmente, todo lo casero está mejor... ¡porque el chocolate caliente estaba! ¡Sin comentarios!
Para los que no lo habéis probado nunca, el Glühwein es un vino especiado, con toques de naranja y limón, que es muy típico de Alemania. Es un vino que se sirve templado-caliente. Es delicioso, aunque cueste creerlo y es perfecto para una tarde de invierno en casa. Canela, anís, clavo, cardamomo... todas ellas le dan un toque especial que os va a encantar y va a llenar vuestra cocina de diferentes aromas. ¡Os va a encantar!
Glühwein
Dificultad: Fácil
Raciones: 4 personas
Etiqueta: Aperitivo Dulce, Navidad
Trotamundos: Europa
Un litro de vino tinto
100 gr de azúcar moreno
Dos hojas de hojas de laurel
Dos ramas de canela
Una pizca de nuez moscada
Siete clavos
Cinco o seis semillas de cardamomo
Tres estrellas de anís
Piel de un limón
Piel de una naranja
- Colocamos todas las especias y las pieles en una olla y añadimos el azúcar.
- Llevamos a fuego medio y cuando empiecen a salir bien todos los aromas añadimos un poco de vino tinto para que no se queme nada. Con una cuchara revolvemos hasta que se disuelva bien el azúcar.
- Añadimos el resto del vino y dejamos a fuego medio. Es importante que no llegue a hervir, intentamos que se mantenga caliente pero no hasta ese punto. Mantenemos durante 30 minutos.
- Colamos el vino para quitar las semillas y lo servimos templado. Lo podemos guardar varios días en frascos de cristal.
¡A disfrutar!
- Os recomiendo que comprobéis el punto de dulzor antes de acabar de cocerlo. Añadimos más azúcar o miel si es necesario. ¡Cuidado con la temperatura!
Seguimos con otra receta de bebida navideña que s toma tradicionalmente en España, Latinoamérica y en algún otro país de Europa en estas fechas: Chocolate Caliente. En nuestro país es típico acompañarlo de churros o de Roscón de Reyes el día 6 de enero. En los países latinoamericanos es muy típico en estas fechas también, a pesar de que las temperaturas son más altas. Hoy os traigo una receta deliciosa y sencilla que sé que os va a encantar.
Chocolate Caliente
Dificultad: Fácil
Raciones: 4 personas
Etiqueta: Aperitivo Dulce, Navidad
Trotamundos: Europa
Receta: Megasilvita
150 gr de chocolate troceado (70% de cacao)
Una cucharada de cacao en polvo sin azúcar
125 ml de nata (crema de leche) para montar
300 ml de leche entera
Dos cucharadas de vainilla en pasta
100 ml de nata (crema de leche) para montar
Dos cucharadas de azúcar
- Mezclamos el chocolate con el cacao puro en un bol amplio.- En un cazo mezclamos bien la nata (crema de leche), la leche y la vainilla y lo calentamos a fuego medio-alto hasta que esté a punto de hervir.
- Echamos el líquido caliente sobre el chocolate. Dejamos reposar un minuto y revolvemos bien para que se mezcle todo y se derrita bien el chocolate.
- Volvemos a llevar a fuego sin dejar que hierva ya que se podría amargar el chocolate.
- Servimos en caliente.
- Montamos la nata (crema de leche) con el azúcar y la añadimos en lo alto de nuestro café. Yo lo he hecho con una manga pastelera con boquilla de estrella.
- Espolvoreamos con un poco de cacao en polvo.
¡A disfrutar!
- En España mucha gente añade un poco de harina o de maicena para que el chocolate esté más espeso.
Y acabamos con una receta más anglosajona, típica de una cadena de cafeterías estadounidenses, que cada año nos sorprenden con cafés especiados como este Gingerbread Coffee. Es un café con toques de jengibre y canela que le dan un toque especial para todos aquellos a los que nos encanta este tipo de café. Es una receta que seguro que os anima una tarde en la que estéis enclaustrados en casa y que solo os apetezca algo caliente acompañado de unas deliciosas galletas de Speculoos. ¡Espero que os guste!
Gingerbread Coffee
Dificultad: Fácil
Raciones: 4 personas
Etiqueta: Aperitivo Dulce, Navidad
Trotamundos: EEUU y Canadá
Café para una cafetera
Dos cucharaditas de jengibre
Media cucharadita de canela
Azúcar moreno
Leche
100 ml de nata (crema de leche) para montar
Dos cucharadas de azúcar blanco
- Mezclamos el café en polvo con el jengibre y la canela hasta que esté bien mezclados. Dejamos reposar unos minutos.
- Si lo hacemos con cafetera, rellenamos la cafetera con la mezcla y lo preparáis como siempre hacéis el café.
- Si habéis utilizado café soluble, calentamos el agua que se indique en el embase y la añadimos a la mezcla cuando esté hirviendo. Mezclamos bien.
- En ambos casos, añadimos el azúcar deseado cuando todavía está caliente y revolvemos hasta que se disuelva.
- Añadimos la leche deseada.
- Montamos la nata (crema de leche) con el azúcar y la añadimos en lo alto de nuestro café. Yo lo he hecho con una manga pastelera con boquilla de estrella.
- Espolvoreamos un poco de jengibre y canela sobre la nata (crema de leche).
- Servir en caliente.
¡A disfrutar!