hoy es uno de esos días que te dices vamos a ver lo que hay en el cajón del frigorífico para hacer un poco de limpieza con lo que nos va quedando. Entre un montón de cosas más, me encuentro un manojo de espárragos verdes un pelin chuchurrios, una bandeja de champiñones laminados en el mismo estado mas o menos, los tristes de nuestra cocina y esto es lo que me ha salido, y con ello participo en Reciclando Sabores:
Ingredientes:
500 gr de espárragos verdes
una bandeja de champiñones laminados
30 gr de mantequilla
30 gr de harina
300 mililitros de leche
una cucharadita de zumo de limón
2 cucharadas de queso palmesano o gruyer rallado
sal, pimienta y una pizca de nuez moscada
Preparación:
Poner los espárragos en una cazuela, cubrirlos con agua, añadir sal, tapar la cazuela y dejarlos cocer entre 5 y 10 minutos. Sacarlos, escurrir bien y reservar 8 cucharadas soperas de agua de cocerlos.
Poner los espárragos en una fuente resistente al horno con todas las puntas hacia el mismo lado.
En una sartén con unas gotas de aceite, saltear los champiñones y colocarlos sobre los espárragos dejando las puntas libres.
Para hacer la salsa, derretir la mantequilla en un cazo, añadir la harina y remover a fuego lento durante 1-2 minutos, incorporar la leche poco a poco, el caldo reservado de cocer los espárragos y la cucharadita de zumo de limón, salpimentar y cocer a fuego lento durante 2 minutos sin dejar de remover hasta que tengamos una crema sin grumos, añadimos la pizca de nuez moscada y lo vertemos sobre los champiñones. Espolvorear con el queso rallado.
Cubrir las puntas de los espárragos con papel de aluminio y gratinarlos durante 2 o 3 minutos hasta que dore el queso.