Os recomiendo MUCHO este pan porque es prácticamente igual al comprado, tanto de sabor como de textura, pero es tremendamente más saludable. Si seguís mis instrucciones al pie de la letra conseguiréis una miga suave y una corteza tierna que os encantará.
Ingredientes (salen 4 panes tamaño pan de hamburguesa maxi):
320gr de harina de fuerza
170ml de leche tibia
1 sobre de levadura de panadería seca (unos 5-6gr)
1 huevo batido
1 cucharada sopera de azúcar
1 cucharada sopera de sal
2 cucharadas soperas de aceite de oliva
Un poco de leche para pincelar
Semillas de sésamo para decorar
Elaboración:
Si tenemos panificadora, empezamos poniendo en la cubeta la leche tibia junto con la levadura, el aceite y el huevo batido. Encima ponemos la harina, la sal y el azúcar y amasamos con el programa 7 (15min de amasado, sin levado) dos veces (en total amasamos 30min) hasta obtener una masa ligeramente pegajosa.
Para hacerla de forma tradicional, ponemos en un bol la harina con el azúcar y la sal mezclándolos bien con la mano. Hacemos un agujero en el medio y en él añadimos la leche, la levadura, el huevo batido y el aceite. Amasamos bien hasta conseguir una masa muy suave y ligeramente pegajosa.
Ponemos la masa en un bol amplio que cubrimos con un paño limpio y dejamos que aumente una o dos horas.
Pasado este tiempo, nos engrasamos las manos con un poco de aceite y sacamos la masa del bol, la desgasificamos y la pesamos. Hacemos cuatro bolitas que pesen más o menos lo mismo diviendo el peso total entre cuatro, les damos forma circular y las colocamos sobre la bandeja del horno previamente cubierta con papel antiadherente. Las aplastamos un pelín con las manos y hacemos unos cortes en forma de balón.
Dejamos que doblen su tamaño y horneamos calor abajo, colocando la bandeja en la zona inferior del horno, a 180º grados con ventilador durante 10 o 15 minutos, hasta que estén dorados por encima.
Los sacamos del horno, los pasamos a una rejilla y en caliente pincelamos con leche y espolvoreamos semillas de sésamo.
Dejamos que se enfríen totalmente antes de comerlos.
Notas:
La receta que os doy es para una masa pegajosa. Si no os engrasáis un poco las manos (ojo, un poco, no os pongáis media botella) se os pegará la masa y será más difícil trabajar con ella. Es mucho mejor que dejéis esta textura en lugar de una un poco más dura porque los panecillos quedarán mucho más tiernos y blanditos, con una miga esponjosa.
Como indico, salen cuatro panes de tamaño comercial, los maxi. No son excesivamente grandes, pero si los queréis más pequeñitos, como una hamburguesa normal que es un poco más pequeña, en lugar de dividir el peso total de la masa entre cuatro podéis dividirla entre seis.
En lugar de sésamo se puede poner semilla de amapola, o nada, o lo que queráis.
Es importante pincelar con leche justo al sacarlas del horno y no antes porque, según mi experiencia, al hacerlo así la corteza pierde esa dureza que tienen los panes al hacerlos en casa y se queda muy muy tierno y blandito. Además, el brillo característico lo consigue igualmente de esta forma.