El pan de soda irlandés es un pan compacto, de miga prieta y con un sabor dulzón y muy particular, fruto de la mezcla de bicarbonato y vinagre (dos ingredientes que también en repostería dan textura y sabor).
Después de varias pruebas en casa, aquí está la mejor opción y la que no dejo de repetir.
Los que hayáis estado en Irlanda y probado el original sabéis de lo que hablo.
La primera vez que lo probé cuando estaba interna en una familia irlandesa me gustó tanto que estuve buscando por internet recetas durante horas.
La receta original la he sacado de Happy Herbivore y la he modificado un poco, ¡por fin el resultado que buscaba! Lo usé para acompañar el queso vegano para rellenar que publiqué hace unos días.
El pan recién tostado con morcilla de alubias y el vegan cheese <3
Así que he hecho lo mismo que con el pan rápido de plátano y semillas, cortarlo en rodajas, congelarlo, y ya tengo para desayunar todos los días!
Ingredientes: (para un pan mediano. Podéis doblar las cantidades para uno grande):
1 vaso de leche de soja
2 cdas. de vinagre de manzana o de vino blanco
2 vasos de harina integral de trigo
1 cda. de bicarbonato
1 cdita. de sal
2 cdas. de azúcar moreno
1 vaso de pasas (opcional)
1 sobre de levadura química
Preparación:Mezclar el vinagre con la soja y dejar la mezcla reposar 5 minutos para obtener el buttermilk.
Si lo hacéis en KitchenAid: Poner todos los ingredientes sólidos y mezclarlos.
Poner el gancho amasador poco a poco añadir la leche dejando tiempo para que se vaya incorporando. Es posible que no la tengáis que usar toda. No hay que amasarla más de 5 minutos o se quedará demasiado dura.
A mano es el mismo proceso, amasando unos 5-10 minutos y sin pasarse.
Os tiene que quedar una masa húmeda, algo pegajosa pero fácilmente manipulable.
Precalentar el horno a 190ºC. Haced una bola con la masa y ponerla dentro de un molde redondo forrado con papel vegetal o directamente sobre una placa forrada. Dejarlo 5 minutos y después introducirlo en el horno.
Si lo queréis algo más ligero lo se puede dejar reposar en un ambiente cálido 1 hora, yo lo dejo reposar cuando tengo tiempo pero está comprobado que no es estrictamente necesario.
Hornear 20-25 minutos y en el caso de que la corteza esté demasiado dura y con un color oscuro, tapar el pan con papel de plata.
Esperar hasta los 30-45 minutos y comprobar con una brocheta si está cocido en el interior. Apagar el horno y dejarlo enfriar.
Hasta a mis padres les ha gustado, teniendo en cuenta que es un pan mucho más apropiado para hacer tostadas que para mojar, ya que la miga no es la que más absorbe.
Disfrutar de lo que queda de semana y un besote gordo!