No tenía ni idea de que podía hacer alioli con algo tan poco usual como es el membrillo.
Pero por muy raro que me parezca a mi, parece que en algunas zonas de Cataluña es algo corriente.
Así que este mes, que tocaba hacer recetas con membrillo para el reto de #juegodeblogueros me vino que ni pintada esta receta.
Que dicho sea de paso no tiene más complicación que un alioli normal que la de cocer previamente el membrillo.
Así que si os animáis a prepararlo, os dejo como se hace.
Pero antes vamos a ver como han usado el membrillo mis compañeros de reto.
Elvira: https://www.asisecomeengranada.com/
Mónica: http://dulcedelimon.com
Eva: http://dulcesfelicidades.blogspot.com.es/
Mari Sol: http://elmenudemicocina.blogspot.com.es/
Inma: http://entre3fogones.com/
Raxel: https://homeandrun.wordpress.com/
Ligia: https://losdulcesdeligia.wordpress.com/
Sara: https://unaitalianaenlacocina.es/
Silvia A.: http://unapizcadena.wordpress.com/
INGREDIENTES:
1 diente de ajo
100 ml de aceite de oliva suave
2 membrillos pequeños (unos 170 gr)
1/2 cucharadita de sal
1 pizca de pimienta
PREPARACIÓN:
Lavamos muy bien los membrillos sin pelarlos y os ponemos en el cestillo de la thermomix. Añadimos medio litro de agua al vaso e introducimos el vaso con los membrillos dentro. Programamos 28 minutos, temperatura varoma y velocidad 2. Al acabar, pinchamos con un cuchillo y si están tiernos los dejamos enfriar.
Una vez fríos, los pelamos y cortamos en trozos, los ponemos en el vaso de la thermomix con el ajo, la sal y la pimienta y trituramos 30 segundos a velocidad 5.
Ahora ponemos la maquina en marcha a velocidad 3 1/2 y vamos echando el aceite por el bocal poco a poco hasta que se acabe.
SIN THERMOMIX:
Primero tendremos que cocer los membrillos al vapor o en agua hirviendo hasta que estén tiernos. Dejamos enfriar. Pelamos y cortamos en trozos. Los ponemos en el vaso de la batidora con el ajo, la sal y la pimienta y trituramos.
A continuación seguimos batiendo echando el aceite poco a poco hasta que se espese.
Ponemos los membrillos en el cestillo, echamos agua en el vaso y cocemos.
Ponemos los membrillos frios y troceados, la sal, el ajo y la pimienta y trituramos.
Añadimos el aceite poco a poco. Hasta que emulsione y espese.
Y de resultado tendremos un alioli de apariencia normal pero de un sabor muy especial.
Con una textura densa y espesa y un sabor ligeramente dulce. Un contraste excepciona
Fuente: este post proviene de Tapitas y postres, donde puedes consultar el contenido original.
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