Si queréis sorprender en casa con una comida especial, sin duda, con esta lo conseguiréis. Lo que más llama la atención: el chisporreteo del arroz al añadir la salsa, prometido
Ya desde la primera versión que os enseñé aquí me quedé contenta con el resultado (a falta de un poco más de salsita) pero esta segunda ha sido la culminación del plato. Me quedó ciertamente como el de los restaurantes!
INGREDIENTES (3 personas):
Calorías por plato: 350
PREPARACIÓN:
Yo tenía arroz de la anterior vez, ya que aproveché a hacer bastante, así que en sta ocasión solo tube que freírlo en aceite caliente y reservar en papel absorvente
Para la salsa, pochamos la cebolla a la que añadimos el caldo concentardo y las setas. A continuación, añadimos el brandi y flambeamos (cuidado con las campanas extractoras) y por último añadimos primero el queso fresco, y una vez disuelto, añadimos la nata (crema de leche) y el queso rallado. Para terminar, agregamos el agua y dejamos que todo se cocine bien a fuego bajo, removiendo de vez en cuando, en mi caso, cerca de 40 minutos aunque con menos tiempo incluso, estará listo. Para la presentación: calentamos la sartén o el wok mucho, que empiece a ahumar incluso, y dejamos en mitad de la mesa. Añadimos el arroz frito, y por último la salsa de setas y queso bien caliente también, removiendo hasta que el arroz la absorba completamente.
Este tipo de platos se han convertido en indispensables para ocasiones especiales. El truco para que no os lleve tanto tiempo hacerlo es hacer bastante cantidad de arroz deshidratado cuando lo hagáis, y dejarlo en un taper hermético hasta su uso. Este mío ha estado cerca de 3 meses en la despensa sin perder propiedades o ponerse en mal estado. Eso sí, a temperatura ambiente
Con esta receta participo en el "Reto Color y Sabor de temporada" de este mes de octubre en el que yo me decanté por las setas como apreciáis.