Para esta receta de leche frita utilizo huevos aunque muchas no los incluyen, bien porque prefieren que el interior de la leche quede completamete blanco, o bien porque su uso recuerda un poco a la crema pastelera. A mí me gusta cómo le quedan aunque le de un ligero tono amarillo , pero ya sabéis, en cocina cada uno adapta los platos a sus gustos.
Espero que estéis disfrutando de este puente de Semana Santa y paséis unas felices vacaciones, y ahora, ¡vamos con la receta!
INGREDIENTES:
1 litro de leche
12 cucharadas rasas de maizena
2 huevos (opcional)
150 gr de azúcar
la piel de un limón
1 rama de canela
aceite de oliva suave (para freír)
Para rebozar:
huevo batido
harina
Para rebozar después de frita:
100 gr de azúcar
1 cucharada de canela en polvo
ELABORACIÓN:
1. Separamos una taza de leche en la que desleímos la maizena. Reservamos.
2. El resto de la leche la mezclamos con el azúcar y dos huevos batidos (debe quedar todo bien integrado). La ponemos a calentar y le añadimos la piel de limón y la rama de canela.
3. Cuando esté a punto de hervir incorporamos la leche con maizena y removemos con una varilla durante unos minutos hasta que adquiera una consistencia espesa.
4. Retiramos del fuego y colocamos la mezcla sobre una bandeja mojada en agua. Dejamos que se enfríe por completo y cuaje.
5. Ponemos una sartén al fuego con abundante aceite. Cortamos la leche ya cuajada en cuadraditos y los rebozamos en harina y huevo. Freímos la leche por ambos lados hasta que estén dorados, retiramos del fuego y los colocamos sobre papel absorbente.
6. Mezclamos 100 gr de azúcar con una cucharada de canela. Una vez fría rebozamos la leche frita en esta mezcla y estará lista para consumir.
¡Buen provecho!
Nos vemos en la siguiente publicación, mientra podéis encontrarme en mi págian de Facebook o en Twitter.