De tanto en tanto tengo que hacer estos macarrones con bechamel que son una adaptación de los que hacia mi suegra, mis hijos me los piden porque se acuerdan, sobre todo Alba. Ella hacia un poco diferente la salsa, y el punto de cocción de los macarrones era también distinto, pero como a ellos les gusta al menos un par de veces al año los hago, no los hago más no porque sean complicados, más bien es porque son algo más pesados de hacer y también de comer.
Esta forma de preparar los macarrones la podéis aplicar a la receta que hagáis normalmente de macarrones con salsa de tomate y carne, tipo boloñesa, yo os explico mi forma de hacerlos y luego cada uno que los haga como más le guste, el resumen de estos macarrones es unos macarrones con carne y salsa de tomate más una buena cantidad de bechamel, queso para gratinar y listos.
Como podréis ver hago mucha cantidad porque como les encantan se los comen por la noche, al día siguiente, etc.
Vamos a necesitar:
½ kilo de macarrones
½ kilo de carne picada (cerdo/ternera)
1 cebolla
2 zanahorias
2 ramas de apio
1 bote tomate al natural grande
Aceite de oliva
Sal, pimienta, orégano
1 vaso de vino blanco
1 cucharada de azúcar
1 litro de bechamel
200 gramos de queso tipo emmental para gratinar
La bechamel que cada uno la prepare como más le guste, a mi me gusta ponerle una vez hecha una yema de huevo y un poco de parmesano, le da un toque estupendo.
Empezamos preparando la salsa para ello limpiamos las zanahorias, la cebolla y el apio y lo picamos todo con la picadora (de esta forma queda tan fino que luego los niños ni lo notan), ponemos aceite a calentar en una sartén honda, añadimos las verduras picadas, dejamos pochar con un poco de sal unos 10 minutos.
Salpimentamos la carne y la ponemos en la sartén cuando esté listo el sofrito, dejamos que se cocine bien dando vueltas hasta que empiece a dorarse, en este punto ponemos un poco de orégano y el vino, dejamos reducir el vino para añadir el tomate triturado, dejamos cocer a fuego lento tapado hasta que en la salsa se vuelva a ver algo de aceite, añadimos el azúcar y rectificamos de sal y pimienta.
Cocemos los macarrones tal y como indica el fabricante, escurrimos y mezclamos con la salsa de carne, damos unas vueltas en la sartén para que se mezclen bien los sabores, pasamos a una fuente de horno, alisamos la superficie, cubrimos con la bechamel, luego ponemos el queso emmental rallado y llevamos al horno previamente calentado a 190º C durante unos 10-15 minutos hasta que estén bien calientes y queso esté dorado.