¡¡POR FIN ES VIERNES!!
Y qué mejor manera para celebrarlo que con estas magdalenas suuuper esponjosas Es la receta perfecta si quieres conseguir que tus magdalenas luzcan un bonito copete. Sólo necesitarás preparar la masa un día antes y refrigerarla durante 24h. Sencillo, ¿verdad? Pues seguid leyendo porque la receta es más fácil de lo que creéis
Ingredientes:
210g de harina
175g de azúcar
190ml de aceite
60ml de leche
2 huevos (talla L)
10g de levadura
ralladura de un limón
una pizca de canela en polvo
una pizca de sal
Elaboración:
En un bol ponemos la harina, la levadura, la canela y la piel del limón y mezclamos.
En otro bol ponemos los huevos y el azúcar, y con unas varillas montamos hasta que los huevos blanqueen. Añadimos la leche, el aceite y la sal y seguimos mezclando 1 minuto más.
A la mezcla anterior, le añadimos la mezcla de la harina y mezclamos bien todos los ingredientes.
Pasamos la masa a un táper, tapamos con film transparente (este debe estar en contacto con la masa) y reservamos en la nevera 24h. Es MUY importante este paso, ya que si no lo hiciéramos, nuestras magdalenas no subirían bien, no estarían igual de esponjosas y no conseguiríamos un buen copete.
Precalentamos el horno a 250º. Sacamos la masa de la nevera (una vez hayan pasado las 24h) y volvemos a batir. Ponemos las cápsulas para magdalenas en el molde y llenamos las 3/4 partes de cada una. Seguidamente, espolvoreamos por encima un poco de azúcar en cada magdalena. Introducimos en el horno y bajamos la temperatura a 210º. Horneamos 14 minutos. Una vez pasado el tiempo, dejamos enfriar sobre una rejilla y…
¡Ya tenemos nuestras magdalenas listas para ser devoradas!
¿Qué os ha parecido? Facilonas, ¿verdad?
Pues ya sabéis, dejádmelo en los comentarios.
¡Un besote!
Rocío