Sin embargo, hay algunas especies de estos moluscos y crustáceos que siguen siendo un lujo para la mayor parte del ciudadano medio. Su precio suele ser bastante desorbitado y, aunque muchos hacen algún reajuste económico para tomarlos, en general son pocos los que pueden comerlos más a menudo. Si te quieres dar el capricho, nosotros te descubrimos sus propiedades y las mejores maneras para prepararlos.
Bogavantes y langosta
El bogavante es un crustáceo de tamaño considerable, con dos grandes pinzas y una ?cáscara' bastante robusta. Se puede comer solo. Para ello, como explican desde Mariskito.com, "es conveniente atar las patas delanteras para cocerlo" y sumergirlo en agua muy caliente con sal. Una vez que comience a hervir el agua, se cuentan entre 20 ó 30 minutos para sacarlo. Después, sólo hay que ponerlo en hielo para consumirlo. Sin embargo, la receta más conocida y que es una auténtica delicatesen, es la preparación de un buen arroz con este crustáceo.La langosta es muy parecida al bogavante, pero no tiene pinzas delanteras y su caparazón aparece recubierto de una especie de espinas. Aunque se puede comer simplemente cocida, existen infinidad de recetas donde podemos usarla como ingrediente. Podemos preparar, por ejemplo, una caldereta de langosta, un suquet acompañada de un delicioso pescado o combinarla con otros mariscos para servir junto con unos grelos. O si lo prefieres, como nos comentan los expertos, podemos hacer un salpicón, con huevo, cebolla, pimienta, aceite y vinagre.
Ostras y percebes
Las ostras son la mejor representación del lujo. Primero, porque son las creadoras de las valiosas perlas y, segundo, porque son consideradas uno de los afrodisíacos más potentes. Sea fruto de la leyenda o verdad, son una opción muy recomendada para pasar una velada apasionada con la pareja. La mejor forma es tomarlas solas con un buen chorro de limón. Pero también puedes darles un toque más especial preparándolas al cava. En esta receta se prepara una salsa especial con huevo, mantequilla y la bebida mencionada.Los percebes alcanzan precios astronómicos porque su recogida es especialmente peligrosa. Como ocurre con prácticamente todos los mariscos, la cocción en agua con sal es la mejor forma de preparación, pero, como nos explican los especialistas, "con un simple hervor en agua con la salinidad adecuada, es suficiente". Los puedes emplear como ingredientes en otras recetas. Por ejemplo, puedes darle con ellos y otros mariscos un toque muy especial a tu paella o a una fideuá.
Estos cuatro mariscos tienen la ventaja de que con un simple hervor en agua con sal están listos para degustar y con un sabor tan excepcional como si preparas la mejor de las recetas. Además, pues idear estupendos platos con ellos o agregarlos a sopas o arroces donde combinan genialmente. Como puedes comprobar, son un alimento de lo más completo.
Recetas:
Arroz con bogavanteBogavante a la crema
Salpicón de langosta
Caldereta de langosta
Ostras al cava
Sopa de ostras
Percebes