Aprovechando las frutas de temporada podemos tener la despensa llena de ricas mermeladas caseras durante todo el año, imagínate aunque sólo hagas 3 o 4 tarros de cada fruta todos los que puedes llegar a almacenar ...
Si no tienes huerta propia o alguien que te quiera bien y te regale la fruta, no nos vamos a engañar, no sale precisamente barato porque la calidad hay que pagarla y para obtener una buena mermelada es fundamental utilizar buena fruta, pero aún así merece la pena, son mermeladas mucho más ricas que las compradas y además sin conservantes ni colorantes y tú mism@ decides qué cantidad de azúcar quieres añadirles, resumiendo, todo son ventajas.
¿Te apuntas a la mermeladaterapia ...?. TIPS:
Envasado: al vacío en tarros de cristal.
Conservación: en despensa o nevera, si los tarros están bien cerrados al vacío la mermelada se conserva en perfecto estado durante muchos meses.
Cantidad: con estos ingredientes salen 8 tarros de 250 ccINGREDIENTES:
2 kg de ciruelas claudias
1 kg de azúcar
1 limónMODO DE PREPARACIÓN:
Lavamos y secamos las ciruelas.
Les quitamos el rabito, las partimos a la mitad, sacamos el hueso y cada mitad la partimos a su vez en dos trozos.
Ponemos en un bol, agregamos el azúcar y el zumo del limón. Removemos bien para mezclar y dejamos macerar durante 4 o 5 horas en la nevera para que las ciruelas suelten su jugo.
Pasamos a una olla y ponemos a cocer a fuego medio sin dejar de remover durante unos 35 minutos en total.
Cuando hayan pasado los primeros 20 minutos de cocción y dependiendo de cómo nos guste la textura de la mermelada, con trozos o sin ellos, le metemos la batidora de brazo, a mi me gusta sin trozos así que trituré completamente las ciruelas.
Seguimos cociendo el tiempo restante, unos 15 minutos.
En caliente, repartimos la mermelada en tarros de cristal llenándolos hasta el borde, tapamos y los ponemos boca abajo, dejándolos así hasta el día siguiente para que hagan vacío.
En cuanto a los tarros y las tapas para el envasado, he de decirte que si la mermelada no se va a consumir enseguida, es conveniente esterilizarlos, pero también es verdad que yo los lavo con agua lo más caliente que sale del grifo y los dejo secar antes de utilizarlos. A mí me va bien de esta forma y nunca se me ha estropeado ningún tarro.
Ya tenemos lista nuestra mermelada casera de ciruelas, ahora toca poner los tarros bonitos para darles ese toque profesional que nos hará triunfar.
Hasta aquí ha llegado la receta de hoy, te animo a que antes de que se termine la temporada de esta fruta la prepares, ya verás como vas a disfrutar tus desayunos y meriendas otoñales con esta mermelada.
También la puedes preparar con ciruelas amarillas o rojas, el procedimiento es el mismo.