Este mes la anfitriona ha sido María del blog Sweetsandgiftsmarietta. Nos ha prepuesto un reto para la vuelta al cole, algo rico para preparar como merienda o desayuno, una receta de bollería pero con masa de pan.
Yo he hecho estos delicosos Minidonuts que a mi nena le vuelven loca y que he preparado con la maquinita que me compré hace poco por casualidad. Bueno por casualidad no, estaba allí para mi porque el día que la sacaron a la venta no quise acercarme por la tienda para no caer en la tentación pero una semana más tarde fui y allí estaba esperándome, cosa rara porque no suelen durar tanto. Fue el destino, jajajaja.
Con estas cantidades salen muchos porque son pequeños. Yo preparé la mitad.
Ingredientes:
300 grs de harina de fuerza
200 grs de harina normal
25 grs de levadura fresa o 2 sobres de la seca
250 ml de leche
60 grs de mantequilla
2 huevos
100 grs de azúcar
1 pizca de sal
Para el glaseado de chcolate:
150 grs de chocolate de cobertura
150 grs de azúcar glass
4 cucharadas de agua
Primero mezclamos la harina con la levadura desmigándola. Añadimos la sal, el azúcar y mantequilla en pomada y mezclamos bien
A continuación añadimos los huevos de uno en uno y finalmente la leche.
Es una masa muy pegajosa que cuesta amasar pero que con un poco de paciencia, o un robot de cocina, se consigue.
Dejamos que leve en un lugar cálido durante un par de horas. A continuación encendemos la máquina de los donuts y con las manos untadas con un poco de aceite vamos dando forma y poniéndolos en la máquina. En un par de minutos estarán listos. Procurad que los agujeros queden bien cubiertos pero sin que sobresalga masa que luego se inflan bastante.
Si no tenemos máquina podemos freirlos u hornearlos. En este segundo caso, recomiendo dejarlos levar una segunda vez con la forma ya hecha, así quedarán más esponjosos.
Para hacer el glaseado, mezclar el azucar glas con el agua. Derretir el chocolate al baño maría o en el micro y mezclar con el azúcar. El glaseado queda estupendo, como el de los donuts de antes, yo diría que es lo mejor de la receta porque trae muchos recuerdos de la infancia.
Para comer solos se quedan poco dulces así que si se van a comer así, mejor echar algo más de azúcar.
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Espero que os haya gustado
Leire
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